
Vecinos de la urbanización Simón Bolívar presentaron una queja en común al ser consultados por los principales problemas del lugar; la mayoría señaló el tema de recolección de desechos como el más irregular con respecto a los otros, “hasta una semana han dejado de visitarnos”.
Uno de ellos fue Rafael López, quien no dudó en indicar que la basura se amontona en cada esquina de las calles del sector, “suelen pasar dos veces a la semana pero han llegado a tardar hasta 7 días en realizar su trabajo “, dijo refiriéndose al aseo.
El equipo reporteril del diario La Región pudo constatar esta situación en la urbanización; no había esquina en la que las bolsas negras no se presentaran como una montaña, una arriba de otra, lo que terminó por darle credibilidad a lo que describieron varios de los que allí residen.
“Tenemos que bajar las bolsas de la basura y colocarlas en el lugar indicado para ello, no podemos dejar que se acumule en nuestros hogares; si no contamos con un servicio de aseo regular la situación empeora con el amontonamiento de los desechos”, comentó uno de los vecinos que prefirió no ser identificado.
Requieren
mayor patrullaje
Aunque no se presenta una elevada inseguridad en la zona, los habitantes afirmaron que el patrullaje “es débil, se necesita un paso más constante de efectivos policiales, esto daría tranquilidad a los lugareños”. Esperan que la solicitud pueda ser tomada en cuenta para que se eleve la seguridad que sienten las personas.
Entre los comentarios referentes a este tema surgieron los de quienes se mostraban inconformes con la cantidad de “muchachos bebiendo en las calles”, además de la música con un volumen elevado hasta altas horas de la noche. “Esto nos afecta a todos, especialmente a quienes tienen niños pequeños y a los de la tercera edad puesto que les perturban el sueño”.
Al límite
las zanjas
Las zanjas que se encuentran al borde de cada bloque se han vuelto recipientes de desechos; la cantidad de restos de comida, botellas y papeles que les arrojan las han tornado insalubres “especialmente cuando llueve porque atraen moscas y zancudos que afectan la salud de los vecinos”.
“No tienen por donde drenar las aguas que allí se acumulan, lo que trae como consecuencia el desbordamiento”, indicó López.
Eterna espera
por una cancha
El deporte para quienes deseen sudar un poco en la urbanización está limitado; el problema no es por falta de cancha debido a que en el bloque 1 se encuentra un espacio deportivo.La irregularidad es la condición en que se encuentra, loque impide realizar actividades físicas de manera adecuada.
El tiempo exacto que llevan esperando por su remodelación no pudo ser precisado; sin embargo, cuando a los vecinos se les consultaba por el lapso que han aguardado para tener una buena cancha, respondían con un simple “uhh”.
“Ni la gobernación, la Alcaldía del municipio Guaicaipuro ni otro ente público se ha pronunciado al respecto, es una deficiencia que tenemos desde hace largo rato”.gf
Carlos [email protected] / @carlossosa7