El primer latinoamericano en ocupar el sillón de director ha prometido independencia de la organización
GINEBRA. Roberto Azevedo, el nuevo director general de la Organización Mundial del Comercio, prometió el martes restaurar el papel de este organismo multilateral en la ceremonia de su nombramiento oficial por parte de los representantes de los 159 Estados miembros, reunidos en una sesión del Consejo de la OMC.
Azevedo llegará a la dirección de la OMC en plena disputa comercial entre China y la Unión Europea. Estos dos importantes actores del comercio mundial tienen varios contenciosos y cada uno enfrenta dificultades económicas: recesión en Europa y desaceleración económica en China, acompañada por un debilitamiento de la balanza comercial.
El brasileño tendrá como principal desafío relanzar las negociaciones de la Ronda de Doha para liberalizar el comercio mundial y ayudar al desarrollo de las naciones más pobres.
En efecto, la elección de un representante de los países emergentes para dirigir esta institución lastrada por potentes antagonismos ha aportado algo de esperanza.
Agencias
