Otra vez Yasiel Puig. El novato sensación del momento en las grandes ligas se hizo sentir de nuevo con un sencillo que impulsó 2 carreras determinantes del triunfo 6-5 de Dodgers sobre Phillies, en lo que fue la sexta imposición consecutiva del equipo de Los Angeles.
Cada día el joven cubano ofrece una demostración de su calidad como bateador y de la intensidad con que juega al beisbol. Esta vez, tomó turno en el séptimo inning con las bases llenas y pescó una slider abajo y afuera, extendiendo totalmente los brazos para halar la pelota hacia su banda y conectar un rolling indetenible entre tercera y shortstop que remolcó las carreras de la ventaja -y al final decisivas- para volverse a ganar las mejores notas del encuentro.
En la entrada anterior Filadelfia se habia ido adelante con un cuadrangular de Chase Utley por la derecha, al cual le partió Puig con tal ímpetu -y hasta atrevimiento- que chocó fuertemente con la cerca cuando la pelota trasponía el campo, rebotando al piso. Se golpeó duro, evidentemente, pero continuó en el juego tras una pequeña sacudidad del hombro. Y después pegaría el incogible para decidir, que dejó su average en .427.
Como dice el manager Mattingly, es contagioso el entusiasmo con que juega el cubano. Como lo demostró un inning más tarde Matt Kent, que robó segunda y tercera -para anotar la sexta con fly de sacrificio- en lo que muchos denominaron «el efecto Puig».
Los Filis pegaron 14 hits contra cuatro lanzadores, tercero de los cuales fue el venezolano Ronald Belisario, autor de un ponche contra su único rival, en el octavo.
Y la «Puigmanía» en su apogeo: el equipo sigue último, pero llevo 51.037 al estadio de Los Ángeles.
Armando Naranjo
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