Una falla en el complejo habitacional La Cascarita está poniendo en peligro a las familias que residen en los seis edificios. Justo por donde se encuentra el parque infantil y la cancha deportiva, el suelo se ha estado hundiendo y cayendo hacia el despeñadero que se ubica en ese lugar.
Erolida Rivas, quien habita en en la localidad, expresó que la superficie debajo de la cancha ha estado socavándose producto de una quebrada.
”Todo esto fue construido en un relleno. Esto era una quebrada que perteneció a la hacienda La Cascarita. Como todo esto es relleno la parte de abajo se está destrozando”.
Igualmente, manifestó que cuando se levantaron las unidades habitacionales no se pudo canalizar la corriente de agua que está debajo de los edificios. Le hace un llamado a los organismos gubernamentales de Miranda a que hagan inspecciones en los alrededores del complejo habitacional.
“Es importante que vengan a ver lo que ocurre. No estoy exagerando. Los edificios se nos pueden caer. Hay que hacerle un llamado al alcalde y a las demás autoridades”, insistió.
Recordó que en una oportunidad los pobladores del conjunto residencial se opusieron a la construcción de seis edificios cerca de la cancha. “Si se hubiesen construidos nuevas torres aquí ya hubiese ocurrido una masacre”.
En varias partes del piso hay huecos y según comentan los vecinos, esto se debe a los hundimientos que ha tenido el terreno por medio de las aguas subterráneas que socavan el piso.
“También hay que hacerle un llamado urgente a la comunidad para que se preocupe de los problemas. Hay gente que se centra en un individualismo espantoso”.
Desde hace quince días el camión que recoge los desechos sólidos no ha hecho acto de presencia en la localidad.
Manifiesta Rosa Mijares que los retrasos en la recolección han generado la presencia de “enjambres” de moscas y otros insectos que merodean en las bolsas y dijo que también hay gusanos.
“Estamos invadidos de moscas y gusanos. Se están metiendo por las ventanas de los apartamentos que están en pisos inferiores”. Además, sostuvo que si las personas no sacan mangueras y lavan , las áreas se ponen “cochinas”.
De igual manera los habitantes quieren que la alcaldía del municipio Guaicaipuro con la intención de que retiren los desechos sólidos. Igualmente declaró que los lugareños ante de acostarse a dormir “obligatoriamente” tienen que cerrar sus ventanas con la finalidad de que los desagradables olores no entren hacia los apartamentos.
También comentan los vecinos que los perros callejeros han ocasionado destrozos a las bolsas que contienen los restos de residuos.
Sin poder jugar
Las áreas verdes al igual que la cancha deportiva de La Cascarita están repletas de vegetación como si fuera una selva amazónica. Opina Gilberto Chacón que actualmente los más jóvenes de la urbanización no cuentan con espacios dignos para poder realizar cualquier especialidad deportiva o divertirse en la rueda.
“Si los niños se meten a jugar en ese parque podrán ser picados por culebras y otros animales que tienen su habita ya constituido en esa área”. Los lugareños aseguran que no toda el área habitacional está cubierto de maleza, pues las zonas verdes si están más cortadas.
Ruido alto
Aseguran las personas entrevistadas que los días viernes, sábados y domingos algunas ciudadanos acosan a los residentes por medio de música a todo volumen desde sus carros. Dicen sentirse perjudicados porque no los dejan dormir. Desean la presencia de agentes policiales a fin de preservar la tranquilidad de los pobladores.
Eduardo Lugo – elugo@diariolaregion.net / @eduardooasis