La madrugada de ayer, tres delincuentes armados ingresaron a la panadería Duri, ubicada en la avenida principal de La Urbina y se apoderaron de una suma aproximada de Bs F 80mil, luego de dominar y maniatar a dos empleados.
El hecho ocurrió a las 3:00 de la madrugada. Los hombres llegaron a la panadería luego de abrir un boquete desde la reja del muro perimetral en una quebrada que los condujo hasta el estacionamiento del edificio residencial que lleva el mismo nombre del negocio.
Pedro Gameiro, encargado del local dijo que allí, subieron por un muro de unos tres metros que los llevó hacia la reja del negocio donde se encuentran los motores de las neveras y otros equipos. Los hombres saltaron por una ventana que los llevó directo a la panadería.
Dos empleados del negocio que pernoctan en el lugar para comenzar a hornear la mercancía de vender a primera hora de la mañana dormían en la litera de una habitación, cuando la luz que se encendió en la pieza los despertó. «Pensamos que no habíamos quedado dormidos y que era el encargado que a veces cuando eso sucede nos despierta», dijo Ángel Jaimes.
Los delincuentes los sometieron, los maniataron y los dejaron sobre una de las camas. Uno de los hombres que empuñaba un arma de fuego se encargó de vigilarlos mientras los dos restantes fueron hacia la caja registradora que violentaron con un destornillador.
También abrieron una caja de seguridad donde guardan el dinero de la remesa del día. Sustrajeron del sitio la suma elevada de dinero en efectivo, además de tarjetas de recarga telefónica y dos equipos celulares.
Las cámaras de seguridad del establecimiento captaron cuando los dos sujetos, uno de contextura más gruesa, violentaban las cajas y causaban destrozos. Tenía los rostros cubiertos con capuchas y franelas, uno de ellos llevaba una gorra que impedía verle el rostro desde la toma.
Antes de huir, los ladrones encerraron a los empleados en la misma habitación. Pasaron la llave por fuera y la dejaron pegada. Ahí estuvieron hasta las 5:45 de la mañana, cuando Gameiro llegó para abrir. «Me extrañé de ver todo apagado. Pensé que los trabajadores estaban dormidos, pero cuando entré todo estaba completamente desordenado. Incluso entraron a la oficina y generaron daños», dijo.
Esta no es la primera incursión del hampa al negocio pero si la más importante. «Han ocurridos otros dos robos pero digamos que leves. A punta de pistola han entrado y someten a la cajera para llevarse el dinero de caja», comentó el encargado.
Efectivos de la Policía de Sucre acudieron al sitio ante el llamado de los encargados. Hasta el mediodía de ayer la denuncia no había sido formulada formalmente ante el Cicpc.
AA