¿Participativos o participatontos?

Leandro Rodríguez Linárez

 

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a participación ciudadana es vital para que las instituciones públicas atiendan y resuelvan las necesidades sentidas del pueblo, las verdaderas, las urgentes, de ésta manera se incrementa la calidad de vida. Una ciudadanía activa obliga a los gobernantes a que cumplan con sus funciones, para eso es la verdadera participación ciudadana, para beneficiar al pueblo. Sin embargo, cuando éste proceso participativo es tutelado o conducido por los gobernantes el resultado es catastrófico, en cuanto todo aquello que provenga de las bases ha sido previamente condicionado por alcaldes, gobernadores o presidentes, a través del chantaje o manipulación de empleos, ayudas públicas, alguna clase de recursos, entre otros.

Supongamos que un Consejo Comunal se encuentre bajo el control de una alcaldía opositora, allí se desvirtúa el concepto de comunidad y reinan los intereses partidistas, donde se origina la corrupción (no olvidemos que son recursos públicos), la exclusión y la manipulación, se benefician solo a simpatizantes, incluso tergiversando la ley, obligando a los habitantes de la comunidad asistir a marchas y todo cuanto acto proselitista haya, sobornándolos con créditos o ayudas que por derecho les corresponde.

Es tan patético lo que ocurre en éstas comunidades sometidas por alguna corriente política que muchas veces en las asambleas ciudadanas se discuten temas partidistas, mientras que los problemas comunitarios (muchos y diversos) se apuntan en una “larga lista de espera”, algo realmente dañino. Así mismo, es público y notorio la utilización de bienes comunitarios para la propaganda política, para la “logística” en días de campaña y días de elecciones, éste comportamiento solo corrobora que en Venezuela los gobernantes han asumido roles de idolatría, son el epicentro social, el pueblo es quien trabaja para ellos.

Todo se agrava cuando nos damos cuenta que el sistema nacional de planificación se alimenta a través de mecanismos participativos y protagónicos del pueblo, pero… una participación sesgada por intereses partidistas nos depara una planificación nacional acorde solo con los intereses de los gobernantes, jamás de los jamases con las intereses del pueblo. Esto amigo lector está ocurriendo con la participación ciudadana en Venezuela, basta entrar a una sede de un consejo comunal para verlo tapizado de afiches y pancartas, por ejemplo, del PSUV. O colocamos a los gobernantes en su lugar para que nos den calidad de vida o seguimos siendo una nación de participatontos.

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