Gran parte de las aceras ubicadas a lo largo de la avenida Bolívar de la ciudad capital mirandina se encuentran quebradas y levantadas debido a la acción de las raíces de los árboles que hacen vida en el sector.
Desniveladas y rotas es como lucen las caminerías por donde circulan diariamente una gran cantidad de personas habitantes y trabajadores del lugar, quienes se quejan por el mal estado del paso peatonal.
“Esto tiene ya más de un año así, las aceras se han roto por los árboles, pero los de la alcaldía,a l igual que las carreteras y avenidas, no han hecho absolutamente nada y en cambio dejan que se vayan deteriorando aún más. Es un peligro porque cerca viven personas de la tercera edad que corren el riesgo de tropezar y caerse”, expresó Evelyn Toro.
Por su parte, el antiguo bulevar que había en las adyacencias de las residencia El Yate ha quedado completamente bajo la maleza del sector, que según algunos vecinos desde el año pasado no ha sido podada.
“Esto antes eran unas caminerías donde uno venía a pasear con la familia, lo que queda ahora son puras ruinas, porque hasta la placita desapareció”, aseveró Toro.
Actualmente sólo se observa parte de lo que años atrás era una pequeña plaza donde los vecinos iban a recrearse y entre el monte aun se ve parte del antiguo paseo.
La plaza que se ubica frente al Liceo Bolivariano Francisco de Miranda está parcialmente bajo el follaje, sin embargo algunos estudiantes de la institución todavía la usan por ratos cortos mientras esperan para entrar a sus actividades escolares.
Donde se disponía la estatua sólo queda la base de cemento, muy deteriorada y rayada por los jóvenes de la zona.
“Es una lástima que un espacio así lo hayan dejado perder y como este existen otros que se han ido borrando del urbanismo de Los Teques”, afirmó Doris Uzcátegui.
Ronald Gil- rgil@diariolaregion.net / @thedaniels21