A punto de hundirse se encuentra el callejón Chapellín, perteneciente a la comunidad tequeña El Vigía, debido a una gran falla en la vialidad que lleva años aquejando a los habitantes de esta zona de la ciudad capital mirandina, quienes piden a gritos una pronta resolución antes de que esto acarree daños mayores.
El asfalto se hunde a la vista de todos cada vez que transita por el lugar algún vehículo pesado, desde hace años la calle tiene una gran falla provocada por unas tuberías pertenecientes a Hidrocapital que ya no funcionan; hace aproximadamente dos años una tubería de aguas negras se rompió haciendo que las cloacas corrieran libremente por la carpeta asfáltica y socavaran el terreno.
“Un día de estos vamos a quedar incomunicados por completo, la vía no estaba tan dañada, pero con la falla de borde que hay en la carretera principal de El Vigía todos los carros, camiones, ambulancias y camionetas de transporte se están metiendo por aquí y han ocasionado que se abran enormes huecos y que la calle se hunda aún más. El asfalto está prácticamente en el aire, no es de extrañar que un vehículo caiga hacia las casas de abajo en un futuro no muy lejano”, manifestó una de las vecinas del sector que no quiso ser identificada.
A pesar de que los vecinos de la localidad aseveran que han colocado avisos indicando que se prohíbe la circulación de transporte pesado por el área, ésta es una de las pocas vías de desahogo que tiene la bajada de El Tambor y por ende transitan todo tipo de vehículos para acceder al centro de la ciudad de Los Teques.
Además, los habitantes del callejón Chapellín han puesto la falla de borde más grande, pues hay algunos palos y hasta cauchos para evitar que los conductores “se peguen” al borde y termine de colapsar la carretera; muchos hacen caso omiso a las medidas y terminan por quitar los objetos de la vialidad.
“Los trabajadores de Hidrocapital vinieron hace poco a verificar un hueco que abrieron para la reparación de otra tubería del área que hicieron hace ya un mes pero no nos dieron respuesta alguna sobre todo este desastre”, afirmó la vecina.
Algunos habitantes cuyas casas y terrenos se ubican cerca de la carretera aseveran que viven en constante zozobra, ya que de colapsar la vialidad se verían seriamente perjudicados por el derrumbe. 
“No hace más de tres meses un carro fue a parar para abajo y cayó cerca de una de las viviendas, si no es así la alcaldía no viene a hacer un buen trabajo; aquí esa situación se puede repetir pero esta vez pudiera dejar varios muertos”, dijo Alberto Carreño.
Por otra parte, toda la carpeta asfáltica del sector se mantiene cundida de huecos de diferentes tamaños, haciendo un poco difícil el tránsito de los conductores por la zona según informan algunos de ellos.
“La carretera de El Vigía que es tan importante para la ciudad está destruida casi por completo, aquí es donde vemos la ineficiencia por parte de la alcaldía para resolver todos los problemas que nos aquejan diariamente a los tequeños”, expresó Isabel Parra.
Monte alto
Algunos tramos de la vialidad que comunica al sector popular El Vigía están obstaculizados por el alto follaje que se ha ido apoderando poco a poco de los hombrillos, por lo que la vista de los choferes que transitan por allí se dificulta sobre todo durante horas de la noche.
“Esta es una vialidad olvidada por los entes gubernamentales. Aquí hay inseguridad y huecos; no existen defensas viales donde deberían estar, ciertas partes carecen de iluminación y no hay rayado.Como si fuera poco, la falta de desmalezamiento afecta gravemente el transito vehicular”, declaró Luis Pernía.
Malos olores
Los vecinos del sector aseguran que el camión del aseo urbano tarda en pasar para recolectar los desperdicios, por lo que los montones de basura se van haciendo cada vez más grandes.
Desde hace más o menos una semana no le ven la cara al camión del aseo,los pobladores dan fe de que el servicio es “muy irregular”.
Sin gas
Otro camión que se desaparece por largos periodos de tiempo de la comunidad es el de Pdvsa Gas, lo que obliga a los usuarios a adquirir los cilindros llenos en otras partes y a gastar más de lo debido.
Inseguridad a mil
Los habitantes del callejón Chapellín aseguran que viven en medio de la inseguridad que mantiene azotada a la zona tequeña debido al poco patrullaje policial con que cuenta este sector de la ciudad.
“Los autobuses que trabajan para la ruta diariamente son asaltados, ya da miedo hasta salir a la puerta de su propia casa. Patrullaje hay, pero de los policías recortando camino por esta carretera porque ni siquiera se bajan a investigar”, dijo una de las vecinas.
Ronald Gil- rgil@diariolaregion.net / @thedaniels21