Numerosas troneras de diferentes magnitudes y una gran cantidad de pantano son sólo un par de problemas con los que deben lidiar diariamente los vecinos de la populosa comunidad guaicaipureña barrio Miranda II, donde sus habitantes expresan sentirse “olvidados por los entes municipales”, pese a que han recibido cientos de promesas.
Desde que comienza la carretera principal que conduce hasta el sector se aprecia a simple vista el mal estado en que se encuentra la carpeta asfáltica, donde se hace imposible encontrar al menos un metro de asfalto sin un bache.
“Vivimos en una desidia total, la calle está llena de pantano y nadie nos quiere ayudar porque esto viene desde hace años. Cuando fue la campaña para la municipales Garcés vino, estuvo aquí; se llenó los pies de pantano y nos prometió muchas cosas, por eso le pedimos que venga a cumplir todo eso porque aquí todos prometen y prometen y luego no hacen nada”, manifestó Gladys Sambrano.
Por otra parte, lo poco que queda de la vía es porque los habitantes de la comunidad la han reparado con su dinero, ya que aseguran que el exalcalde Alirio Mendoza los olvidó por completo y no les brindó la ayuda que en varias oportunidades solicitaron.
El camino carece de señales de tránsito y de defensa vehicular en sus primeros metros, por lo que los conductores que circulan por el lugar deben hacerlo con sumo cuidado ya que los vecinos normalmente están fuera de sus casas compartiendo en familia.
Servicio de transporte
Debido a las fallas que tiene la vialidad respecto a los huecos, baches y hundimientos, el servicio de las unidades de transporte que se encargan de cubrir dicha ruta tarda en llegar hasta el sector, por lo que los usuarios muchas veces prefieren trasladarse a pie.
“Sí tenemos transporte aunque falla mucho, pero entendemos que el estado de la vía afecta a los choferes, por eso le pedimos a Garcés que nos resuelva y nos eche una mano ya que ganó”, expresó Sambrano.
Fallan los servicios
Al igual que el transporte público, los servicios básicos como la distribución de gas, suministro de agua, alumbrado y recolección de basura se han visto afectados por la falta de asfaltado de dicha localidad tequeña.
Los vecinos aseguran que el poco alumbrado público con que cuenta la calle principal falla diariamente haciendo que la zona se convierta en una boca de lobo durante las noches debido a los apagones.
“Los postes se la pasan apagados, nadie los ha venido a reparar a pesar de que ya se ha colocado la queja en Corpoelec y esto nos está afectando a todos”, afirmó Oscar Díaz.
Asimismo, las viviendas de la comunidad carecen por completo de tuberías de agua directa, por lo que deben esperar a los camiones cisterna para llenar sus tanques, pero éstos tardan en pasar.
“Tenemos que esperar de 15 a 20 días a los camiones de Hidrocapital para que llenen los tanques y ni siquiera nos los llenan completos. Aquí hay niños pequeños que necesitan del mineral diariamente”, dijo Sambrano.
Las tuberías de aguas negras que tienen las casas fueron construidas por los habitantes de la localidad. Otro de los servicios que tarda en llegar es el de la distribución de las bombonas por parte de Pdvsa Gas.
“El camión del aseo hacía años que no venía, pero ya al menos viene más seguido los días”, aseveró Sambrano.
Maleza
El camino que conduce hasta el corazón del barrio Miranda II y que da acceso también a Las Terrazas I y II está cundido de maleza desde hace ya más de un año porque las cuadrillas de Corpomiranda no han acudido a limpiar dicha zona.
Sin canchas
Los niños y jóvenes que hacen vida en la comunidad deben jugar en la calle llena de pantano, ya que el sector no cuenta con canchas ni parques de bolsillo donde los más pequeños puedan disfrutar durante sus ratos libres.
“Los niños juegan en plena calle, donde pueden ser atropellados por los carros; aquí no tenemos áreas de esparcimiento, sólo pantano, huecos y monte”, declaró Sambrano.
No hay ambulatorio
Hasta el día siguiente deben esperar los habitantes del barrio Miranda II al momento de enfermarse para recibir atención médica en el Centro de Diagnóstico Integral (CDI) que se ubica en Los Lagos.
“Aquí no hay ambulatorio cerca, cuando uno se enferma en la noche debe esperar hasta la mañana para ir al CDI si es que no se muere”, dijo Sambrano.
Por este motivo los vecinos piden a Garcés que “mande con fundamento” y que les brinde la ayuda que han estado solicitando desde hace más de dos años.
Ronald Gil- rgil@diariolaregion.net / @thedaniels21