La actriz Drew Barrymore cree que las malas experiencias por las que ha pasado como consecuencia de su popularidad le servirán para saber sobrellevar el interés mediático que puedan despertar su hija Olive (1) y el futuro bebé del que está embarazada.
«Aunque haya crecido en una época en la que los medios de comunicación no se hacían eco de todo lo que hacías o decías, durante mi juventud pasé por momentos muy críticos porque salieron a la luz secretos de mi vida privada y estuve expuesta a una gran presión. No lo sabía por aquel entonces, pero que me pasara eso fue una bendición porque ahora estoy preparada para casi cualquier cosa. Está claro que no todo lo que hago tiene mucha repercusión pero sé cuándo las cosas son de interés público, así que voy a intentar mantener siempre la calma y transmitir energía positiva a mis hijos», señaló la intérprete.
De hecho, su capacidad para reflexionar fue uno de los pilares a los que se aferró para superar la gran cantidad de problemas que experimentó desde que saltara al mundo de la interpretación a los 11 años.
«Con el tiempo aprendes qué cosas merecen la pena en la vida y cuáles no. Por ejemplo, para mí siempre ha significado mucho la gente a la que quiero, las películas y actuar. Fueron tres pilares que me salvaron en los momentos más difíciles y gracias a ellos tengo una vida maravillosa hoy en día. En la vida no puedes dejar de luchar solo porque no te vaya como te gustaría», aseguró.
Agencias
