“Un suplicio” es lo que viven a diario los habitantes de las comunidades Palo Alto, Santa Eulalia, Las Brisas y Retamal, ya que muchos de ellos aseveran que la línea de transporte que se encarga de cubrir dichas rutas no da abasto para tanta gente.
Largas colas se originan en la parada ubicada en la calle Miquilén para poder acceder ha dichas localidades tequeñas, sobretodo durante las horas del medio día y después de las 5:00 p.m.
“Los retrasos en los carros se debe también al mal estado de la vialidad, la carretera está muy mala y cada vez se pone peor y los de la alcaldía no han hecho nada al respecto”, dijo Erika Brito.
Choferes y vecinos de dichas barriadas guaicaipureñas ruegan por una mejora en el estado de las vías, cuya carpeta asfáltica se encuentra llena de troneras, fallas de borde y derrumbes que amenazan con dejar incomunicados estos sectores de la ciudad capital.
“El transporte se tarda de 20 a 30 minutos, a veces hasta más. La vía está muy deteriorada desde hace años. Durante las horas pico que es cuando todo el mundo viene de sus trabajos o clases las colas para tomar uno de los carros son kilométricas”, manifestó Jessica López.
Por su parte, los pasajeros se quejan igualmente del alto índice de inseguridad que se vive tanto en la parada de la Miquilén como en los diferentes sectores de Santa Eulalia y Palo Alto.
“Varias veces lo roban a uno en los carritos, ya da miedo hasta salir a la puerta de su propia casa. Indudablemente necesitamos más presencia policial en esta zona de Los Teques, a ver si así se aplaca un poco el problema”, afirmó Abel Linares.
Ronald Gil- rgil@diariolaregion.net / @thedaniels21