Este domingo en horas de la tarde tanto visita como reclusas Instituto Nacional de Orientación Femenina (Inof), ubicado en la capital mirandina, protestaron luego que las autoridades del penal les impidieran el acceso de alimentos crudos y otros enseres al penal.
Familiares de las internas provenientes de otros estados del país, manifestaron su preocupación en las afueras del centro penitenciario y aseguraron que los Derechos Humanos de las reclusas están siendo cercenados.
“No nos han dejado pasar la comida y solo están dejando pasar a los familiares directos, estamos haciendo cola desde las cinco de la mañana y aun no hemos pasado, esas mujeres se están muriendo de hambre allá adentro”, expresó María Alfaro.
Aseguraron que las reclusas están padeciendo de distintas enfermedades debido al mal estado del penal y no tienen la atención médica adecuada; “las aguas blancas están ligadas a las aguas negras, los alimentos que les dan ahí adentro tiene hongos, gusanos y moscas”, señaló Alfaro.
Se conoció que este penal, adaptado para 500 reclusas, alberga aproximadamente 1200, las cuales se encuentran en situación de hacinamiento.
Los familiares informaron que la visita de los miércoles están suspendidas, por lo que solo les quedan los fines de semana para asistir al lugar. “Hoy fue un caos total, ellas tienen 8 días encerradas, supuestamente nos dejarían venir los sábados y domingos, pero ayer no hubo visita y el que venga el sábado no puede venir el domingo”, aseveró Luis González.
Por otra parte expresaron que desde el pasado 22 de diciembre la visita de menores de edad quedó prohibida, “Están prohibiéndoles ver a sus hijos, eso es una violación de los Derechos Humanos, hay demasiadas irregularidades el primero de enero cerraron dos pasillos del penal porque ellas dijeron maldito gobierno”, denunció González.
En este sentido, González agregó que la directiva del centro de reclusión no ha dado la cara para solventar la situación que viven a diario dentro del Inof.
Jorge Zambrano, quien también es familiar de una de las recluidas en esta cárcel de mujeres recalcó que en el sitio hay ratas, cucarachas y otras alimañas que están generando enfermedades a las internas, “mi esposa está enferma y no hay nadie que la atienda”.
Igualmente aseguró: “la directora del penal Yetzi García las amenazó con trasladarlas a otro penal si la hacían molestar”.
Viven un clavario
Las privadas de libertad que anteriormente fueron dotadas con uniformes para mantener el orden dentro del penal fueron despojadas de sus pertenencias, objetos que fueron quemados y desechados. En este momento solo cuentan con dos de estos atuendos según informaron varios de sus allegados, quienes creen esta limitación afecta la higiene de la reclusas.
Afecciones estomacales; como gastritis y amibiasis, además de infecciones respiratorias y otras enfermedades son el día a día de estas mujeres, quienes esperan ser procesadas para salir en libertad.
Kelly Rodríguez
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