Es fácil sucumbir ante la cotidianidad. Tras año y medio viviendo en la reconocida urbanización de Los Palos Grandes, al este de Caracas, las calles se convierten en el “día a día” y pareciese que dejas de percibir los detalles que rompen el paisaje monótono.
Cada mañana paseo calles y trasversales que separan mi dormitorio de la estación del metro. Pero un día reacciono y constato que lo que es mi zona de residencia, para otros es una zona de despeje y gastronomía. Fue así como decidí un día pasarme el “switch” y explorar esa maravillosa urbanización, que muchas veces es confundida con la popular Altamira.
DE TURISTA EN MI URBANIZACIÓN
Me tomo el tiempo para ver a dónde se agrupan los comensales ¿A dónde come el visitante? Decido comenzar desde las cercanías de la estación del metro de Altamira, a unas pocas calles de la plaza, e ir explorando la oferta gastronómica.
DELICIAS “ON THE WOK”
En la primera Avenida con primera transversal de Los Palos Grandes hay un establecimiento que rompe, de buena manera, con lo tradicional de la zona; pequeñas mesas en una terraza de escasos metros y un llamativo letrero amarillo de letras rojas, hacen que On The Wok sea el centro de las miradas de los transeúntes.
Su oferta gastronómica es amor a primera vista (o mejor dicho, a primer olfato). La propuesta es simplemente suculenta. Una barra te permite elegir una base: Arroz integral, arroz blanco, fideos o vegetales. Luego se eligen las proteínas: Pollo, carne, cerdo o mixto.
El paso siguiente es elegir la salsa, de las cuales ya he probado 3, todas suculentas al punto que hacen salivar mi paladar mientras escribo estas líneas. La de maní picante, curry y la de ciruela al estilo Hong Kong son mis recomendadas. A la mezcla se le suman vegetales y exóticos toppings que contemplan maní y piña. Toda esta combinación, llena de sabores y aromas orientales, se lleva al Wok (una especie de sarten chino).
Este estilo de cocción, además de sano, conserva y hasta resalta los sabores. Para finalizar, el preparado es servido en una caita china ¡Como las que vemos en las películas! Y te obsequian una galleta de la suerte. Lo divertido es que el plato lo armas tú y cada visita puede ser una experiencia diferente variando uno o dos ingredientes. Por todo lo anterior este local se ha vuelto de mis preferidos en Caracas.
LAS MEJORES PAPAS FRITAS DE LA CIUDAD
Internándose un poco en Los Palos Grandes, específicamente entre 2da y 3ra transversal con la avenida Andrés Bello, está SanduChef. De este local me habían comentado muchas veces porque lleva bastante tiempo “de moda”.
Su fama es bien justificada, pues su propuesta ha logrado llevar los sándwich de Caracas a otro nivel, algo mucho más gourmet. El SanduThai es el que he probado, porque como ya sabrán amo la comida especiada.
Aunque los sándwich son los protagonistas, las papas fritas de este establecimiento se han llevado todos los elogios de los comensales. Para mí son las mejores papas a la francesa de la ciudad. Me comentan amigos que antes eran trufadas, pero que luego cambiaron. No sé si las mías eran trufadas o no, pero tenían un “no sé qué” que las hacían provocativas, adictivas y diferentes.
CAFÉ PARA DESPEJAR LA MENTE
No podemos ser indiferentes ante la difícil situación que vive en el país. Este proceso de ir descubriendo los espacios gourmet de Los Palos Grandes coincide con los días de barricadas y enfrentamientos. Sin embargo, hay una zona de tolerancia donde, pese a las circunstancias, los vecinos se distraen dejando atrás el conflicto. Sin duda la plaza de la urbanización es un lugar que permite salir del caos caraqueño y de momento pensar que estás en una ciudad de primer mundo.
En un costado de la Plaza, se ubica un pequeño café, cuyas mesas brindan refugio a los visitantes. Es el lugar perfecto para tomarse un té relajante o disfrutar un buen café mientras se ve a los niños jugar con los perros que salen a pasear de la mano de sus dueños. Mi recomendación en este espacio es el chocolate caliente y la torta de jojoto.
Este ha sido mi sitio para despejar la mente en estos momentos tan convulsionados; al punto que he ido casi que diariamente.
CON ACENTO MARROQUÍ
Hay un lugar en Los Palos Grandes que rompe la monotonía gastronómica que a momentos parece adueñarse de la ciudad capital. Se llama Marrakech y como el nombre bien lo indica es un lugar para rendir culto al paladar con comida Marroquí.
Este restaurante es de esas opciones que uno agradece existan en esta zona, donde puede disfrutarse de comida oriental y un buen vino kosher. La interesante propuesta gastronómica de este restaurante llama la atención de los que buscan lo diferente.
Al llegar al restaurante Marrakech, me ofrecen un menú de gastronomía Magreb. Esto me causó curiosidad porque no sabía a lo que se refería. Tras leer un poco conocí que así se denomina a la región norte de África, y la palabra traduce “Lugar donde se pone el sol”. De ahí que el menú MAGREB comprende gastronomía con influencia de Argelia, Libia, Mauritania, Túnez, el Sahara y Marruecos.
LA NOTA DULCE
Ningún paseo gastronómico de Los Palos Grandes estaría completo sin una parada en la chocolatería LA PRALINE. Aquí los bombones y trufas son los protagonistas, engalanados con los más diversos sabores de relleno.
Algunas creaciones usan preparaciones a la manera artesanal:
Mazapán – Elaborado con almendras molidas y azúcar en diferentes proporciones.
Praliné – Mezcla tradicional de la pastelería en la cual se combinan almendras o avellanas con una confitura de azúcar caramelizada.
Gianduja – Bombón cuyo relleno tiene un alto porcentaje de crema de avellanas.
Los rellenos de frutas, especias e infusiones, complementan la oferta de propuestas para combinar con chocolate blanco, oscuro y de leche. Mis recomendados de siempre son: Flor de parchita, tronco, flor blanca de canela y frutos del mar.
EXCITANDO EL PALADAR
Gabriel Balbás
Mochilera gourmet
Twitter e Instagram: @gabrielbalbas