
A pesar de estar plenamente identificados, tanto los agresores de Moisés Guánchez (un grupo de efectivos de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB), así como el asesino de Adriana Urquiola, (un hombre que admitió haber disparado desde su vehículo contra una barricada siguen libres.
En el primero de los casos los efectivos castrenses que enviaron a Guánchez al hospital tras dispararle y golpearlo en medio de una manifestación en Montaña Alta, fueron fotografiados por vecinos cuando sacaban a rastras del centro comercial La Cascada al joven; las imágenes fueron publicadas por los medios de comunicación, pero los implicados en la brutal golpiza siguen en libertad.
Guánchez permaneció 5 días hospitalizado en el Victorino Santaella de la capital mirandina. El joven fue detenido por la GNB dentro del centro comercial La Cascada el 5 de marzo, cuando salía de su lugar de trabajo, un restaurante de comida mexicana ubicado en la feria.
Luego de dispararle y golpearlo fue llevado por los efectivos castrenses al referido nosocomio donde, según versión de los propios galenos, se les impidió prestarle atención médica hasta que por presión de su madre fue ingresado.
Recibió cinco impactos de perdigones, uno a quemarropa a nivel de la entrepierna, lo que amerita una nueva operación que será realizada en los próximos días.
La familia del joven, quien permanece en reposo absoluto en su residencia, denunció que los GNB intentaron sembrarle media docena de bombas molotov, miguelitos, varios metros de alambre de púa e intentaron que fuera procesado igualmente por el robo de dos motos.
Gracias a las imágenes tomadas por vecinos de la zona, el muchacho obtuvo libertad plena tras permanecer varios días custodiado por efectivos policiales en su habitación del hospital Victorino Santaella.
Asesino en fuga
En el caso de Urquiola, la joven embarazada que cayó muerta cerca de una barricada instalada por manifestantes en la carretera Panamericana a la altura de la urbanización Los Nuevos Teques, el homicida admitió en una entrevista a un medio de comunicación nacional haber disparado y asesinado por error a la joven la noche del domingo 23 de marzo.
A pesar de que el sujeto se presentó en el Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc) Los Teques pocas horas después del hecho, los efectivos tras interrogarlo le permitieron retirarse de las instalaciones huyendo, según su propia versión, fuera del país.
La joven muerta, quien trabajaba como intérprete de señas en el noticiero de un conocido canal de televisión, se encontraba junto a su esposo cuando recibió el balazo. Adriana decidió bajarse del autobús en el que se trasladaba a la ciudad de Los Teques, cuando la unidad tuvo que detenerse producto de manifestaciones en la localidad.
El homicida, quien narró lo ocurrido en entrevistas ofrecidas desde el exterior, dijo que regresaba de la ciudad de Valencia cuando a la altura de la curva de Los Nuevos Teques se encontró con una “guarimba”, decidió bajarse del carro y al ver que no podía avanzar decidió disparar al aire.
Una de las balas impactó contra un poste rebotando e hiriendo de muerte a la joven embarazada cuando caminaba por la zona en busca de transporte.
Justicia para algunos
El dirigente de Voluntad Popular y concejal del municipio Carrizal, Manolo Blanco, lamentó que mientras los agresores de Guanchez y el asesino de Urquiola gozan de libertad, efectivos del Cicpc, Sebin y la GNB detienen a vecinos de Montaña Alta cuyo único pecado ha sido protestar contra la inseguridad, escasez y desabastecimiento.
“Extraoficialmente manejamos la información de que los allanamientos y detenciones que se practicaron contra nuestros vecinos son por el caso de un efectivo del Cicpc que resultó herido de bala en la zona el pasado 27 de marzo”, dijo Blanco.
Aseguró que nuevamente queda claro que en el país hay justicia solo para quienes están de lado del Gobierno, “a Guánchez casi lo matan, sigue postrado en una cama; sus agresores están identificados y para él no hay justicia”, dijo.
En cuanto al caso de Urquiola señaló que el país sigue en shock tras conocer cómo se le permitió huir del país al asesino a pesar de que había sido identificado por la prensa y testigos presenciales del suceso.gf
Cerca del centenar
No hay cifras oficiales de la cantidad de heridos producto de las 99 protestas que en 54 días se han registrado en los Altos Mirandinos. El movimiento estudiantil reseña que el número ronda los 50 lesionados, la mayoría tras recibir perdigonazos o golpes al ser detenidos en medio de protestas.
En Los Teques los heridos se han registrado en las inmediaciones del kilómetro 21 de la Panamericana, donde de hecho ocurrió el asesinato de la joven Urquiola. En Carrizal, los heridos se han presentando en Montaña Alta, mientras que en Los Salias han sido en la avenida perimetral, la redoma de San Antonio y la recta de Las Minas.
Daniel Murolo – [email protected] / @dmurolo