
En estos días de vacaciones por Semana Santa muchas fueron las personas que decidieron quedarse en sus hogares apartando cualquier viaje a la playa o algo similar. Esto no quiere decir que no tengan otras alternativas para disfrutar estas fechas y El Ávila es una de ellas.
Grandes y chicos, no importa la edad, el Parque Nacional ha estado repleto de familias que buscan disfrutar un momento diferente en la tranquilidad de la naturaleza.
Con vestimenta morada, por la Semana Mayor, muchos han aprovechado para pagar alguna promesa. “Acostumbro a subir hasta la pequeña gruta de la Virgen para agradecer por todo lo que me da cada año”, aseguró uno de los creyentes que se acercó al lugar el Jueves Santo.
Hay otros que hacen el recorrido de ida y vuelta simplemente por ejercitarse, especialmente los que se dedican al running, pues creen que es la mejor manera de mantenerse en forma, fortalecer las piernas y obtener una mayor resistencia a la hora de sus carreras.
En pareja
Los enamorados que desean un paseo sin necesidad de gastar mucho dinero es otro de los grupos que pone a prueba su cuerpo en el recorrido. Al llegar al punto final se comen uno de los populares helados que venden al frente de la zona de ejercicios.
Los que están acostumbrados a esta rutina aconsejan a los “novatos” a contar siempre con agua y una barra energética ante cualquier mareo que puedan sufrir mientras suben por el rojizo camino de tierra y piedras.
Carlos Sosa – [email protected] / @carlossosa7