La policía israelí anunció el domingo la detención de 26 activistas de extrema derecha que se manifestaban contra la visita del papa Francisco al Monte Sión, en Jerusalén.
«Estos manifestantes reunidos en torno a la tumba de David lanzaron piedras y botellas a las fuerzas de seguridad. Dos policías resultaron ligeramente heridos», declaró a la AFP el portavoz de la policía, Micky Rosenfeld.
El papa tiene previsto celebrar el lunes una misa en el Cenáculo, en el Monte Sión, el lugar donde según la tradición Jesús cenó por última vez. Ese mismo lugar, pero en la planta baja, también es venerado por los judíos por ser el lugar donde se encontraría la tumba del rey David.
Entre los detenidos figura un soldado «que amenazó a un policía con su arma cuando uno de sus compañeros fue detenido», añadió el portavoz. «Algunos de los manifestantes entraron en el edificio de la tumba de David antes de ser evacuados», precisó.
Según la radio pública, unos 150 extremistas se habían concentrado en la madrugada del domingo para denunciar la visita del papa así como las «cruzadas y la Inquisición» de las que fueron víctimas los judíos en el pasado.
Estos incidentes se registraron en el lugar que según la tradición albergaría la tumba del rey David, en la planta baja del mismo edificio. El lugar es también un santuario musulmán.
En las últimas semanas se han registrado concentraciones similares en el Monte Sión de judíos ultra-ortodoxos y nacionalistas que consideran «impía» la misa del papa prevista en el Cenáculo.
Para evitar incidentes, las autoridades israelíes han emitido órdenes de alejamiento a estudiantes de una yeshivá (escuela talmúdica) instalada en el Monte Sión.
AFP
