El príncipe Enrique de Gales llegó ayer a Brasil para iniciar una visita de cuatro días en la que asistirá a partidos del Mundial de fútbol y conocerá de cerca varios proyectos sociales.
Tras arribar ayer a Brasilia, el príncipe visitó el Centro Internacional de Neurorrehabilitacion Sarah Kubitschek, referencia en rehabilitación infantil a través de tecnología de punta y deportes.
Por la tarde está previsto que Enrique concurra al Estadio Nacional Mané Garrincha para ver el partido entre Brasil y Camerún.
Mañana partirá hacia Belo Horinzonte, donde visitará el centro en el que entrenarán los equipos olímpicos y paraolímpicos británicos que participarán en los Juegos de Río de Janeiro 2016.
Y luego acompañará el choque entre la selección de su país, que ya está eliminada del Mundial, y Costa Rica.
Según informó la embajada británica, la segunda visita del príncipe Harry a Brasil tiene por objetivo estrechar los lazos entre ambos países.
El príncipe Enrique, de 29 años, visitó Brasil en 2012, ocasión en la que pasó por Sao Paulo y Río de Janeiro.
Agencias