Al menos cinco familias fueron presuntamente excluidas del plan de Sustitución de Ranchos por Viviendas (SUVI) por algunos voceros del Consejo Comunal Colinas del Ángel, quienes además no han dado a conocer el monto total aprobado por el Gobierno para la construcción y desarrollo del mismo según informaron algunos afectados.
En constante vilo y drama viven los miembros del sector A de dicha comunidad tequeña, ya que muchos de ellos se vieron obligados a derrumbar los pequeños ranchos de bloques que poseían para darle paso a unas viviendas que nunca llegaron, por lo que varios viven hacinados en hogares ajenos y otros tantos se refugian en pequeñas casas de zinc.
“Esta es la fecha en la que no he podido solicitar el estado de cuenta para presentar a la asamblea la memoria y cuenta. En el momento en que hubo cambio de firmas la vocera de contraloría no se presentó y desconocemos el motivo; en ese entonces éramos tres las que teníamos que ir juntas para hacer los trámites, pero ella nunca dio la cara. Fundacomunal finalmente hizo el cambio de firmas, pero lo estaban haciendo a mis espaldas y eso que en ningún momento me negué; cuando voy a averiguar al banco ya estaban hasta abriendo la cuenta”, declaró María Peña, segunda vocera del Comité de Finanzas.
Aseguró que son varios los beneficiarios que fueron excluidos del plan sin explicación ni motivos aparentes, mientras que a otros los tienen engañados desde el año pasado.
Beneficiarios
Al inicio del desarrollo del mencionado plan de sustitución estaban incluidas un total de 35 familias, quienes vivían en el sector antes señalado, pero actualmente cinco de ellas no cuentan con el beneficio.
Asimismo, los grupos afectados por la presunta arbitrariedad del consejo comunal cuentan en su núcleo familiar con personas de la tercera edad, niños, jóvenes y personas discapacitadas que deben vivir hacinados en ranchos de tabla o zinc.
Muchas de las viviendas improvisadas no cuentan con tuberías de aguas negras, por lo que sus habitantes se ven en la obligación de hacer sus necesidades fisiológicas en papel periódico y tobos, para luego desecharlos en las adyacencias.
“Nadie nos atiende, una de las voceras me dijo que me entendiera con el Ministerio de Hábitat y Vivienda en Caracas, y eso que yo fui la que le facilité para que nos dieran este beneficio a todos. Además nunca han hecho asambleas ni reuniones. A mi me excluyeron de todo”, dijo Peña.
En alto riesgo
Varias de las casas improvisadas que están apostadas en el sector A de Colinas del Ángel se encuentran en alto riesgo, por lo que las familias temen que con las recientes lluvias el terreno ceda y deje viviendas tapiadas.
“La ingeniero que está supervisando la obra ni siquiera es civil sino electricista. Ella me dijo que iba a hacer una losa flotante, cosa que no es viable para la construcción de viviendas porque yo a través del consejo comunal hice un curso de ingeniería y arquitectura en la Universidad Central de Venezuela (UCV), donde me enseñaron lo básico y eso que ella dijo no es lo correcto”, afirmó Peña.
Fuera del ámbito territorial
También explicó que la mayoría de las viviendas que están siendo actualmente construidas por el SUVI están ubicadas fuera del ámbito geográfico de la comunidad Colinas del Ángel, ya que son invasiones.
Insultos y amenazas
Varios vecinos del lugar, quienes aún esperan por una vivienda digna, dan fe de que han recibido amenazas e insultos por parte del ciertos voceros que afirman que quedarán fuera del beneficio.
Sin servicios básicos
Actualmente el sector donde varias familias viven hacinadas en ranchos de zinc tiene sumamente deterioradas las torrenteras y canales que transportan el agua de lluvia, así como las escaleras que dan acceso a la zona desde la vialidad principal.
Las pocas tuberías de aguas negras que existen fueron instaladas por los vecinos y presentan varias fallas.
Ronald Gil- rgil@diariolaregion.net / @thedaniels21