El PSUV está «cazando» a Capriles con un revocatorio

El artículo 72 de la Constitución Nacional establece que para solicitar un referendo revocatorio a una autoridad electa por el voto popular es necesario que a partir de la mitad de su mandato, el 20% de los electores de la circunscripción electoral respectiva hagan la solicitud mediante sus firmas; pero para que sea efectivo hace falta que participen al menos el 25% de los electores totales y que los votos a favor de la revocatoria sean superiores a los que obtuvo el funcionario en ejercicio del cargo.

La mitad del periodo de los gobernadores se cumple este diciembre (fueron electos el 16/12/2.012); lo que implica que entraríamos en el tiempo legal para iniciar los trámites ante el CNE. En el caso de Miranda los electores están por el orden de los dos millones. Es decir, que las firmas requeridas para hacer la solicitud del revocatorio serían 400.000 y la participación electoral debe ser superior a 500.000 votantes; pero los votos de los que quieren que Capriles no siga siendo gobernador deben ser más que los 583.660 con los que fue electo en el 2.012.

Si tomamos como indicador los últimos resultados electorales que sacó el Gran Polo Patriótico (GPP) en Miranda (493.406 votos), se concluye que alcanzan para las 400.000 firmas y estaría cerca de los 500.000 electores de la participación electoral necesaria; pero le faltaría 90.254 para los 583.660 votos con lo que fue electo Capriles. Estos números referenciales indican que si la oposición completa decide abstenerse de participar en un eventual revocatorio, todo el esfuerzo recaería en el GPP y, como quedó demostrado, no tendría la fuerza electoral para alcanzar el objetivo.

Aún así, convocar un revocatorio a Capriles sería una estrategia política de distracción; y la idea está siendo evaluada por el Psuv nacional, pero bajo dos condiciones mínimas: que el CNE lo pueda ejecutar con éxito y que el liderazgo nacional de Capriles pueda poner en peligro la continuidad en el poder de la cúpula roja; y ante esta última posibilidad harán lo imposible por mantenerlo amarrado al estado con esta amenaza para impedir que recorra libremente el país; y es lógico pensar que lo intentarían mediante una agresiva campaña de desprestigio por supuestos malos manejos de recursos púbicos para que no se “vea” que es por temor a perder el poder. Capriles debe saber más que yo sobre este plan porque tiene una intensa agenda de contacto comunitario que le está haciendo dejar “el pellejo”, como cuando fue candidato presidencial, para evitar que lo agarren desprevenido.

COMO SHAKIRA. Este domingo se cumplen exactamente 209 días desde que Francisco Garcés fue juramentado como alcalde del municipio Guaicaipuro (tomó posesión del cargo el 31/12/2.013), y por tal motivo realicé un riguroso trabajo hemerográfico de los tres diarios más leídos en la zona y que publican temas locales (La Región, Avance y Últimas Noticias) para determinar la cantidad de denuncias relacionadas con su ámbito de competencias y pude contabilizar un promedio de 11.2 por cada día, para un total de 2.341 entre los tres periódicos; en temas como fallas en la recolección de la basura (836), inseguridad (627), vialidad urbana en mal estado (418), caos vehicular y similares (217) y otras (243); pero lo más insólito es que Garcés nunca hace referencia a estas denuncias cuando emite alguna declaración pública sino que lo hace sobre temas nacionales o política interna del Psuv. Por qué este silencio?. Pudiera ser por tres razones. Una es que como apenas viene dos días a la semana a Los Teques, es posible que no le alcance el tiempo para leer temas locales en la prensa y por eso los desconoce; otra es que como no tiene identidad con el municipio, poco le importan sus problemas; y la tercera, es que aún los burócratas que trajo de Caracas no le han elaborado un diagnóstico objetivo sobre la problemática del municipio y por eso los pocos planes que ha presentado son insuficientes y efectistas, como el del asfaltado, que no tocan el “barrio adentro”…

FRACASO TOTAL. Las elecciones internas del Psuv para escoger a los 537 delegados del III Congreso, fueron un absoluto fracaso por donde se las vea; pero lo más grave fue la precaria participación electoral, de la cual no se conocen números oficiales. Por qué este sospechoso silencio?. Les presento algunos datos comparativos sobre algunos delegados recién electos en los altos mirandinos, para que tengan una idea de las razones de ese secretismo. En Guaicaipuro, el delegado más votado fue Kendrick Figueredo con 3.706 votos, de 70.000 militantes que tiene el Psuv en el municipio; pero hace 8 meses fue electo concejal con 45.563 votos; y Wisely Álvarez, también fue electa delegada con 3.121 votos, pero en el 2012 sacó 50.126 votos para ser diputada regional. Lo mismo pasó en Carrizal porque Farith Fraija fue candidato a alcalde el año pasado y sacó 10.301 votos, pero acaba de ser electo delegado con 1.270 votos, de 9.000 inscritos; igual que en Los Salias, donde Mariana Sánez, después de obtener 7.011 votos como candidata a la alcaldía, fue electa delegada con 819 votos, de 7.000 militantes. El colega Politólogo Nicmer Evans, de reconocido pensamiento oficialista, estimó la participación electoral en 12% a nivel nacional; pero en Guaicaipuro llegó al 8.8% porque la suma de los votos de los 14 candidatos fue de 6.221, de los 70.000 inscritos.

EL BOZAL ROJO. No dudo que los seis recién electos delegados (as) de los altos mirandinos sean unas personas valientes que tratarán de ser uno de los dos voceros del estado ante la plenaria del Congreso del Psuv para exponer las inquietudes de las UBCH´S sobre la ineficiencia y la corrupción en el gobierno de Maduro; pero me invaden naturales reservas cuando veo que son funcionarios públicos con cargos importantes. Kendrick Figueredo, concejal; Luís Rodríguez, Director de la Oficina Municipal Antidrogas; Rubén Díaz, ex recién Gerente de Corpoelec de esta zona; Wisely Álvarez, diputada regional; Farith Fraija, Presidente del Metro de Los Teques y Mariana Sánez es la Directora del Registro Principal de Miranda. Alguien podría creer que alguno de estos “valientes guerreros de la revolución” sería capaz de cantarle los errores a Maduro en su cara, y arriesgarse a que los expulsen del Psuv como le sucedió a Héctor Navarro por apoyar a Giordani o a perder el “cambur”?.

Sergio Graffe

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