AFP / Gerard Julien
El atacante Raúl García logró a tan solo dos minutos de finalizar el partido, marcar el gol del empate 1-1 y así el paso para otro encuentro por la Supercopa de España el próximo viernes.
El Atlético de Madrid igualó a un gol por lado con el Real Madrid en el partido de ida de la Supercopa de España, jugado en el “Santiago Bernabéu”
Ventaja para el Atlético de Madrid en la ida Supercopa de España, que logró sacar el empate 1-1 al Real Madrid en la cancha del Estadio Santiago Bernabéu.
James Rodríguez, quien se estrenó como goleador con la camiseta merengue, abrió el marcador a 9 minutos del final, mientras Raúl García puso las tablas para el conjunto colchonero.
Para el Atlético de Madrid, una pequeña ventaja para la vuelta, que se disputará en el Vicente Calderón el próximo viernes y para el Real Madrid, alarma total, pues Cristiano Ronaldo no pudo jugar más que 45 minutos antes de ser sustituido por James Rodríguez debido a una lesión.
Hasta pasada la media hora, el partido no había dado la sensación de derbi, si bien los dos hombres de la banda izquierda del Atlético de Madrid, Koke y el lateral Guilherme Siqueira habían sido amonestados antes de que se cumplieran diez minutos.
Atlético de Madrid, que tardó en encontrarse, había cedido el control del balón a los locales en los primeros minutos; el extremo merengue Gareth Bale se puso manos a la obra instantáneamente, escapando una y otra vez de su marca.
Pero aún así no lograba acomodarse para disparar. Con Toni Kroos en el control del centro del campo, y el ya habitual tridente al frente, los balones iban y venían de una banda a otra del Real Madrid mientras los colchoneros intentaban frenarlos como podían.
De ahí que hasta el minuto 10 no se viera un solo disparo. Fue Bale quien probó a Miguel Ángel Moyá, pero el balón, demasiado flojo, salió desviado.
Para la segunda mitad y ya sin Cristiano en el campo, la tensión y la agresividad iban en aumento; a una dura entrada de Gabi a Kroos siguió un altercado entre Mario Mandzukic y Sergio Ramos, que, a discreción, intentó golpear en la cara al croata después de que ambos cayeran en la disputa de un balón aéreo. El árbitro puso hielo a la situación amonestando a los dos jugadores.
Así, la primera ocasión clara de gol en 25 minutos desde que arrancara la segunda mitad llegara en el cobro de una falta. Bale logró encontrar un hueco en la barrera con un potente disparo que fue repelido por Moyà antes de que Kroos, en el rechace, lo mandara a las nubes.
El partido comenzaba a trabarse a 15 minutos del final, cuando ambos técnicos decidieron mover fichas. Diego Simeone, quien ya había enviado a Antoine Griezmann al campo en lugar de Saúl, realizó su último cambio, enviando a Raúl Jiménez en sustitución de Mario Mandzukic. Al mismo tiempo, Carlo Ancelotti envió a Ángel Di María, quien se llevó una ensordecedora ovación al entrar al campo sustituyendo a Luka Modric.
Cuatro minutos después, James se estrenó como goleador con la camiseta merengue. El ’10’, que no había intervenido en la jugada, estuvo atento para pescar un balón que Godín había logrado evitar que el pase llegara con comodidad a Benzema, muy cerca de la línea, tan solo para ponerlo en los pies del colombiano, que frente al marco, disparó para batir a Moyá.
La aflicción duró poco a los colchoneros, pues Raúl García respondió a dos minutos del final. En un cobro de esquina de Koke, el delantero español aprovechó un error defensivo de Gareth Bale para vencer a Iker Casillas con la suela del zapato.
Suárez es tratado
El delantero uruguayo Luis Suárez, que ayer fue oficialmente presentado como nuevo jugador del Barcelona, dijo que está siendo tratado por profesionales y que no se repetirán las conductas violentas.
Suárez quiso tranquilizar a los aficionados y aseguró que no volverá a protagonizar conductas como el mordisco que le propinó al italiano Giorgio Chiellini durante el pasado Mundial.
«Que los fans estén tranquilos; no se volverá a repetir», aseguró Luis Suárez, quien ha recordado que ya pidió «perdón a todos» por su acción, que acepta las sanción que la impuesto la FIFA por ello y que está siendo tratado por «profesionales adecuados» para acabar con este comportamiento reincidente.