Están prohibidas las actividades de competencia extrema y tropa en planes vacacionales

1
Como padre debe supervisar que su hijo no sea sometido a esquemas militares o le quieran inculcar proselitismo político en medio de las actividades recreativas

Cada vez que el calendario anuncia la llegada del receso escolar, muchos son los representantes que ven en los planes vacacionales la solución para que sus hijos “maten” las horas de ocio, pero pocos son los que se preocupan por averiguar qué actividades les ofrecen a los pequeños.

Precisamente a esos padres confiados van dirigidas las recomendaciones de La Cátedra Libre Antidrogas (Cliad) del Instituto Pedagógico de Caracas, adscrito a la Universidad Pedagógica Experimental Libertador (UPEL) que coordina el profesor Hernán Matute Brouzés,quien es enfático alseñalar “que las vacaciones escolares no son un obstáculo ni un vacío programático sino una oportunidad para seguir fortaleciendo y desarrollando la prevención, momento especial de redefinir acciones, actividades y mejorar los abordajes”.

En tal sentido, es el promotor de sembrar valores y habilidades para la vida a través de mini charlas, conversatorios, juegos didácticos y muchas actividades recreativas en medio de los planes vacacionales, ocasión propicia además para colocar los lazos azules, símbolo de la prevención.

A tomar en cuenta

A la hora de decidir cuál plan vacacional le conviene a su hijo del amplio abanico que se ofrece, bien sea de empresas privadas, entes gubernamentales o su propio lugar de trabajo, debe considerar que:

1.-Los planes vacacionales deben estar bien estructurados, con diseño integral, perfectible en su desarrollo y con una articulación entre actividades y días. No son cortes secos sino eslabones interconectados y con progresividad en las metas y logros.

2.-Deben armarse bajo un esquema que permita aprendizajes significativos no escolares (convencionales) con hilos conductores basados en “valores” y en “habilidades para la vida”, a través del juego, de la diversión, entretenimiento, recreación, del deporte, o actividad física, cualesquiera que ellas sean.

3.-Deben reforzarse los hábitos de higiene, salud, alimenticios, así como la socialización, asertividad, y la comunicación en todo su espectro.

4.-Está prohibido el manejo de las actividades y de sus exigencias bajo esquemas prusianos (militares), de tropa, o de competencia extrema, y bajo la óptica de una patrulla de scout.

5.- Las actividades deben ser flexibles, permeables, divertidas, integrales, democráticas, plurales, consensuadas en lo posible con los propios niños y adolescentes.

6.-No está permitida la incorporación de cantos político-ideológicos-partidistas ni ninguna actividad de ese tipo, ya que desnaturalizarían la función de un plan vacacional, violarían nuestras leyes y vulnerarían los derechos de los niños.

7.-Los padres deben investigar la trayectoria de las organizaciones que ofrecen dichos planes y poseer toda la información sobre las mismas.

8.-Los recreadores deben estar entrenados y ser preferiblemente educadores o estudiantes de educación, o en su defecto con “habilitación docente”. Los organizadores y recreadores deben estar atentos para que el bullying o acoso no tome lo espacios del plan vacacional.

9.- Hay que estar atentos a todas las medidas de seguridad (prevención extrema). La vida, salud, y seguridad de los niños y adolescentes en espacios abiertos y relajados, sin la presencia de maestros-profesores ni de los padres o representantes, debe y tiene que ser superior, integral, más profunda, de mayor espectro y radio (prevención 360º).

10.- Es importante solicitar por escrito las responsabilidades que asumen los organizadores de planes y campamentos vacacionales, así como lo que ofrecen, exigiéndoles mucho más que las simples actividades ofertadas, la mayoría de las veces sin contenido transformacional educativo-pedagógico.

Johana Rodríguez – jrodriguez@diariolaregion.net/@michellejrl

Salir de la versión móvil