Un gran barullo se originó en las instalaciones del supermercado, ubicado en el Centro Comercial La Hoyada desde tempranas horas de este martes debido a la llegada de algunos productos de la cesta básica que tenían semanas “desaparecidos” de los anaqueles de bodegas y abastos.
Largas colas se observaron durante todo el transcurso de la mañana, la mayoría de las personas se acercó al recinto para adquirir carne de res regulada, producto que fue el más buscado durante el día.
Asimismo, los estantes se vieron repletos de harina de maíz que no duró ni media hora en los anaqueles según aseguraron algunos consumidores, por lo que fueron pocas las personas que “corrieron con suerte” y pudieron llevar el producto a sus hogares.
“La harina de maíz es el producto más escaso que hay en los mercados, por eso cada vez que llega a un lugar se forman largas filas tanto para ingresar a los comercios como para pagar en las cajas. Esta vez estuvieron todas las cajeras del supermercado y la cola se movió más rápido, pero las pacas volaron en cuestión de minutos”, manifestó Rosario Fuentes.
Por otra parte, “hizo acto de presencia” el aceite de soya, cuyo precio por litro es de Bs. 53 y aunque no es el preferido por muchas personas, la mayoría decidió llevar cuatro litros, cantidad permitida por cliente.
“No hay aceite vegetal, el que llega es de soya y se acaba mucho más rápido a la hora de cocinar porque los alimentos lo absorben más. Particularmente he tenido que cambiarle la dieta a mi familia casi que semanalmente dependiendo de qué productos llegan y cuáles no. Hay mayonesa, pero no es regulada, al igual que la mantequilla y el papel higiénico”, indicó Virginia Oropeza.
Continúa la escasez
Los encargados de ciertos supermercados que hacen vida en la ciudad capital aseveran que continúan los problemas con la distribución de alimentos por parte de las empresas encargadas, lo que ocasiona el retraso en los pedidos y que se originen colas cada vez más largas porque la demanda aumenta.
“Si pedimos 20 cajas solo nos mandan ocho. Esto hace que las personas se desesperen por adquirir el producto y cuando llega se forma el caos en los establecimientos”.
Ronald Gil- rgil@diariolaregion.net / @thedaniels21