Desde hace poco más de tres meses fueron paralizados los trabajos de construcción de una pantalla en el barrio Nuevo de la carretera vieja Caracas – Los Teques, por lo que vecinos claman por la culminación de la obra.
“Hace tres años arrancaron con esos trabajos con la intención de atender una situación de emergencia que se presentó con tres viviendas que se vieron afectadas por un movimiento de tierra y las lluvias; la obra empezó de lo mejor pero hace como tres meses los obreros paralizaron sus labores y dejaron el trabajo sin terminar”, declaró Jhonny Pernía, lugareño.
–Esta obra se inició gracias a un trabajo en conjunto con la empresa privada y autoridades del gobierno de Miranda, lo que solicitamos en este momento es que el ingeniero encargado nos diga si van a continuar o no ya que desde que los obreros se fueron nadie nos ha dado la cara y es evidente que el trabajo quedó a medias.
Quienes residen en la zona indicaron que cuando empezó la obra se vieron beneficiadas tres familias que estuvieron a punto de perder sus viviendas, sin embargo actualmente otras casas se encuentran en alto riesgo ya que tras los múltiples movimientos de tierra que se hicieron para la instalación de la pantalla y las lluvias, el sector permanece de nuevo en peligro.
“Es precisamente esta la razón por la que necesitamos saber si van a continuar o no con la obra, entendemos que posiblemente sea por la escasez de cemento que no han seguido los trabajos, pero es necesario que nos den la cara y entiendan nuestro llamado de atención”, explicó el entrevistado.
Escaleras peligrosas
Además del tema de la pantalla cuyo trabajo aún no ha sido concluido, otro problema afecta a quienes residen en el barrio Nuevo de la carretera vieja Caracas – Los Teques, en la zona dos de la comunidad unas escaleras no cuentan con el respectivo barandaje y ponen en peligro a niños, mujeres embarazadas y personas de la tercera edad.
“Agradecemos la construcción de las escaleras, pero en tiempos de lluvia como los que estamos viviendo se convierten en guillotina ya que el suelo se vuelve baboso y no es seguro para quienes las transitan regularmente”, explicó el representante de la comunidad.
-Le hacemos un llamado a las autoridades encargadas del bienestar de los habitantes para que atiendan esta situación que afecta a muchas personas.
Rosario de problemas
Las caminerías en mal estado, torrenteras con años sin mantenimiento y aguas servidas sin la respectiva canalización completan la lista de problemas con los que deben lidiar los residentes del barrio Nuevo.
Quienes hacen vida en el lugar aseguraron que en reiteradas oportunidades se han enviado comunicados a los entes gubernamentales para gestionar las ayudas con respecto a los temas mencionados y no han recibido respuestas positivas.
Están conformados en consejo comunal y pese a contar con el certificado emitido por Fundacomunal, la atención de las autoridades ha sido nula.gf
Como “camellos”
desde hace 10 años
Un tema que vale la pena resaltar es que hace 10 años se inició un proyecto para el suministro de agua en la zona, el cual cuenta con la construcción de los tanques más no de los ramales, según explicaron los vecinos.
“Hace falta que se concluyan los ramales que llevarán el vital líquido a las cuatro zonas que integran el barrio, estamos esperando que nos bajen los recursos desde el Gobierno para concluir el proyecto y contar con agua directa”, expresó Pernía.
Yhanny Casares – ycasares@diariolaregion.net / @YhannyCCM