Y de nuevo la absurda y gastada perorata presidencial que convoca- una vez más- a participar en “La batalla económica” para hacer frente al desabastecimiento
Manuel Barreto
“Sólo porque existe la escasez existe un problema para formular leyes morales; mientras los bienes sean sobreabundantes (bienes “libres”) no resulta posible que haya conflicto sobre su uso y no se necesitan acciones de coordinación. Por tanto, se deduce que cualquier ética correctamente concebida debe formularse como una teoría de la propiedad, es decir, una teoría sobre la asignación de derechos de control exclusivo sobre bienes escasos. Porque sólo entonces resulta posible evitar conflictos de otra forma inevitables e irresolubles”. Hans-Hermann Hoppe
Desabastecimiento, escasez, ineficiencia, corrupción, incapacidad… ¿Qué pasó acá en lo que nos va quedando de País? De acuerdo a los economistas, se hace menester buscar el origen en ese empeño en controlar los precios, hecho que limitó con severidad la capacidad productora de las empresas en Venezuela. También destacan que el régimen, al controlar TODAS las divisas, considerándose con la debida destreza y capacidad para manejar las importaciones necesarias para el país, aceleró el proceso de destrucción del aparato productor nacional, y a esto debemos añadir, aún con mayor peso, el estridente y fatídico pito, acompañado por un dedo que señalaba la aniquilación del incipiente desarrollo de la industria agroalimentaria venezolana…”Exprópiese, Exprópiese” escuchábamos con sorna, burla y cinismo… Y en esas expropiaciones se decretaba la incautación del futuro de todo el país…
La seguridad alimentaria es la existencia de condiciones que posibilitan a los seres humanos tener acceso físico, económico y de manera socialmente aceptable una dieta segura, nutritiva y acorde con sus preferencias culturales… ¿Podemos entonces hablar de Seguridad Alimentaria en nuestro país cuando el 80% de los alimentos son importados…?
¿Contamos con tal seguridad cuando se hace menester, cuando es prácticamente una vergonzosa y humillante “necesidad” soportar estoica y denigrantemente una interminable cola que consume su tiempo y su dignidad? Lo único que se logró con tan deleznables prácticas fue el surgimiento de una extraña “clase social” denominada “bachaqueros”, puesto que a la clase media se le ha ido transformando paulatinamente en… media clase.
Y de nuevo la absurda y gastada perorata presidencial que convoca- una vez más- a participar en “La batalla económica” para hacer frente al desabastecimiento de alimentos, medicamentos y otros productos básicos que sufre el país, por culpa del imperio, de la burguesía, de los escuálidos, de la Iglesia, de las iguanas, de los colombianos, en fin, todo aquello que permita eludir la única responsabilidad que recae ante quienes han destrozado no solo la economía de nuestro país, sino el porvenir de una Nación que en buena parte y por mucho tiempo, se dejó llevar por tantas sandeces.
Que va Presidente, asuma su barranco, pues son tantos los frentes de batalla, que será menester el concurso y compromiso de todos los ciudadanos de buen talante, en virtud que el alocado régimen que usted encabeza dilapido ya no se sabe cuántos “Planes Marshall”, sin dejar nada loable o palpable en la disminución de los índices de pobreza, en una educación de calidad y pertinente con este tercer milenio.
Vaya Presidente – por supuesto aproveche que se acerca el carnaval y disfrácese porque de lo contrario … – y haga su cola como cualquier venezolano de a pié, para que se percate del sentimiento de esa lavativa que ustedes se empeñaron en denominar “Soberano”, cuando, luego de horas de angustia, desesperanza y desamparo en pos de una medicina que a veces cuesta la mitad del salario del desdichado, con ese perdido estoicismo escucha como respuesta a su zozobrante solicitud: ¡NO HAY!