Trabajadores del ambulatorio Dr. Manuel Morillo, ubicado en la comunidad José Gregorio Hernández, afirman estar trabajando con las uñas debido las fallas que presenta el centro de salud a nivel eléctrico y de infraestructura.
Los problemas son varios según los que día a día atienden a los pacientes de la zona en el conocido centro de salud, sin embargo aseguran que nada les impide abrir sus puertas para los que los necesitan.
“Todo empezó con una filtración en el baño del personal, las paredes comenzaron a humedecerse y el agua se botaba constantemente, reportamos la falla y duramos así varios meses, cuando finalmente llegó un equipo técnico para resolvernos el problema nos dijeron simplemente que habían detectado una falla y que para evitar un corto circuito debíamos cortar la luz unos días”, explicó Carmen Díaz, doctora del centro.
Unos días fácilmente se convirtieron en años y el ambulatorio de José Gregorio lleva desde principios de 2014 funcionando con un servicio eléctrico a medias.
“Aquí operan simultáneamente un Barrio Adentro y este ambulatorio perteneciente a la red municipal, nosotros, nuestra parte del consultorio, no cuenta con servicio eléctrico mientras el módulo de Barrio Adentro si funciona normalmente”, puntualizó.
Asegura que se trata de una contradicción a la cual trabajadores y pacientes se encuentran ya acostumbrado, Wilmer Hurtado, paciente del centro alega que gracias a que se trata de un ambulatorio que solamente trabaja medio día no se siente mucho la falta de luz.
A pesar de ello, Díaz comenta que se trata de un servicio que no debería faltar en ningún centro de salud y asegura que han puesto la queja varias veces ante las autoridades quienes le responden que se encuentran esperando que les bajen los recursos.
“Nos explicaron que la parte eléctrica sólo puede ser resuelta por la alcaldía municipal y ellos nos dicen que debemos seguir esperando”, concluyó.
ZA / zaraque@diariolaregion.net