Cuando la empresa White Star Line construyó El RMS Titanic, al comienzo del Siglo XX, lo presentó como el barco más grande y seguro del mundo; y para demostrarlo, organizó un crucero de exhibición por el océano Atlántico que saldría desde Inglaterra hasta varias ciudades de los Estados Unidos, pasando por Canadá; pero a los cuatro días de haber zarpado y recorrido 2.335 Km, chocó con un inmenso iceberg que lo hundió en menos de tres horas y generó la muerte de 1.512 personas, de las 2.224 que iban a bordo. La obra de ingeniería marítima jamás concebida por el ingenio humano, había colapsado a pesar de su fama de indestructible.
En 1.997 el cineasta James Cameron presentó la película Titanic en la que recreaba algunos episodios de aquel fatal accidente; y a pesar de que el argumento central fue la historia de amor entre los jóvenes protagonistas, también reflejó la soberbia del capitán de la nave en no tomar decisiones oportunas ante las evidentes señales de que iba directo al desastre; sin embargo, la escena que más recuerdo de ese film fue la indiferencia de los músicos de la orquesta en seguir tocando sus instrumentos como si no pasara nada, en un vano intento por transmitir calma ante la zozobra colectiva; sabiendo que sus melodías no despertaban el interés de nadie.
Aunque han pasado 103 años desde aquella fatídica noche entre el 14 y 15 de abril del año 1.912, son muchas las lecciones y enseñanzas que se han desprendido para ser aplicadas tanto en la vida personal, empresas o gobiernos; especialmente las relacionadas con lo que no se debe hacer ante una crisis anunciada o en desconocer la realidad.
Cuando analizo el actual discurso de algunos directivos del Psuv o de altos funcionarios del gobierno de Maduro sobre la supuesta fortaleza del proceso político iniciado por el finado Chávez o tratando de negar la grave crisis económica o de servicios públicos en Venezuela, la conclusión a la que he llegado es que actúan como los músicos del Titanic; porque su fracasado modelo nos ha llevado a ser el primer país del mundo con los mayores índices de inflación, escasez e inseguridad; aunque insistan en presentar una realidad distinta o en atribuírsela a una imaginaria “guerra económica”, inducida por el imperio o por la oligarquía apátrida.
El síndrome “de los músicos del Titanic” no evita que ocurra el desastre, y por el contrario, lo acelera; porque la miopía política es el primer indicador de que se aproxima el colapso y para solventar una crisis el primer paso es reconocerla y tomar las decisiones adecuadas; pero mientras se insista en tocar una melodía que nadie oye o en aparentar una fortaleza que ya no es tal, es cuestión de poco tiempo para el desplome y después no servirá ni un milagro divino, como lo esperaban los ocho músicos del titánico barco con su canción final “Más cerca, Oh Dios, de Ti”.
MANUELA, LA MAMA DE ADRIANA. Cuando aquel 23 de marzo del 2.014 fue asesinada la bella joven Adriana Urquiola en las adyacencias de la Urbanización Los Nuevos Teques, de Los Teques, muchos pensamos que ese crimen también quedaría impune como el 98% de los que ocurren en Venezuela; sin embargo, no contábamos con la constancia de su madre para exigir justicia. Manuela Pérez movió cielo y tierra para que el responsable del asesinato de su hija y de la criatura que llevaba en su vientre, pagara por esa monstruosidad. Fue una cruzada digna de admiración. Manuela luchó, luchó y luchó para lograr que el asesino confeso fuese incluido en la lista roja de Interpol, hasta que fue detenido en Colombia y traído a Venezuela. Ahora se espera que no ocurra como hace más de un año, cuando Jonny Bolívar escapó de la justicia de forma misteriosa en una situación irregular posterior al crimen, relacionada con la camioneta que manejaba al momento de realizar los disparos que le quitaron la vida a Adriana y a su hijito, Alex. He hablado un par de veces por teléfono con Manuela, pero es una dama que cuenta con todo mi respeto y admiración como si la conociera de toda la vida.
COPEI REPOTENCIADO. El Presidente de Copei en Miranda, Enríque Mendoza, tiene más de un año viniendo todos los lunes a Los Teques para reorganizar el partido a nivel local. La Dirección Regional designó una Comisión Organizadora Municipal, compuesta por 15 miembros; y 12 equipos de trabajo por áreas específicas. Se trata de una nueva e interesante metodología sobre el activismo político, de la que los copeyanos esperan buenos resultados para próximas elecciones. La parroquia Los Teques fue subdividida en 14 sectores geográficos, con sus respectivas directivas de 5 integrantes, igual que las parroquias Altagracia, Tácata, Paracotos, Cecilio Acosta, San Pedro y El Jarillo; además, ya se constituyeron los 108 comités de base correspondientes al mismo número de centros electorales del municipio. Esa estructura política ya está operativa y contempla la suma total de 655 militantes. Ayer sábado, inició el trabajo de evaluación de ese trabajo con la juramentación de los comités de base de los sectores Camatagua, El Casco del Pueblo, El Rincón y El Paso; proceso que continuará hasta los dos meses siguientes hasta completar el resto.
LOS PREDESTINADOS. El próximo domingo, el Psuv realizará primarias abiertas para escoger sus candidatos a la Asamblea Nacional, entre 1.162 postulados por las 87 circunscripciones electorales de todo el país; sin embargo, en el caso de Miranda ya se tiene una aproximación casi del 100% de los nombres predestinados para ser “electos por las bases”. En temas electorales siempre he tenido reservas en hacer pronósticos pero como manejo el desarrollo de las tendencias internas del Psuv en este estado y conozco que el Reglamento de Postulaciones le permite a la Dirección Nacional “salvar” a los perdedores en una primera instancia, me aventuro a afirmar que los candidatos serán Elías Jaua, Claudio Farías, Elio Serrano, José Guillermo Yánez, Blanca Eekhout, Antonio “el potro” Alvarez, William Ojeda y Raúl Salmerón o Erika Ortega por este circuito de los altos mirandinos. Si estos nombres se confirman luego del próximo 28 de junio, será la prueba irrefutable de que no fue una elección “democrática y protagónica” sino que se impuso la línea de los padrotes rojos…
Sergio Graffe