Sindicalistas de la construcción denunciaron que su sector sufre un desempleo de entre 70% y 74% por la paralización de obras por falta de materiales de construcción
56 saqueos y 502 protestas se registraron este año por la escasez de alimentos, medicamentos y productos de higiene personal, según el Observatorio Venezolano de Conflictividad Social (OVCS). El 98% de las protestas fueron pacíficas, pero lo preocupante es el aumento de actos vandálicos contra almacenes, farmacias y supermercados, reseñó el diario ABC de España.
Algunos analistas temen que si no se remedia pronto la escasez de alimentos que hay en Venezuela, podría generarse un hecho social como el Caracazo, acaecido en 1989 y que acabó con la presidencia de Carlos Andrés Pérez.
El director del OVCS, Marco Antonio Ponce, le dijo a ABC que hay microestallidos sociales todos los días. Para este año, el Fondo Monetario Internacional (FMI) pronosticó que el país podría cerrar con una inflación superior al 170% y una caída del PIB del 7%, la más grave recesión registrada en el continente.
Esto sucede por el creciente intervencionismo en la economía. Los constantes controles de cambio y precios son características que agravan la ausencia de inversiones y pérdida de rentabilidad del petróleo, único producto de exportación del país.
Sindicalistas de la construcción denunciaron que su sector sufre un desempleo de entre 70% y 74% por la paralización de obras por falta de materiales de construcción.
Especialistas en economía temen que la falta de divisas cause la paralización de varias empresas por falta de productos importados. La distribución de alimentos sufrirá un impacto negativo por la expropiación de los galpones de Empresas Polar de La Yaguara. La MUD condenó “la insoportable e insólita situación de ruina que el pueblo venezolano soporta debido a la destrucción de la economía perpetrada por el Gobierno nacional. A la escasez de alimentos y medicinas que hemos venido sufriendo por la destrucción del aparato productivo y por el robo masivo de los dólares generados por el petróleo, se agrega ahora un conjunto de medidas oficiales cuyo efecto práctico es agravar la crisis creada por ellos mismos”.
Vía El Carabobeño