Parlamentarias en un ambiente electoral “enrarecido”

Durante los últimos 16 años los venezolanos nos hemos mentalizado a que aumente la crispación política cuando se aproxima una elección que representa un interés especial para el gobierno, porque es una estrategia que ha pretendido generar abstención en el votante opositor y en algunas ocasiones le ha funcionado; pero es preocupante lo que se observa en esta ocasión porque pareciera que existe la pretensión de sobrepasar la frontera de una simple estrategia abstencionista para crear las condiciones artificiales que “justifique” una eventual suspensión de las elecciones parlamentarias.

En la medida que se acerca la fecha del 6 de diciembre para las parlamentarias, el ala radical del gobierno seguirá “apretando tuercas” para enrarecer el ambiente pre electoral buscando que la alternativa opositora se salga de la ruta constitucional, democrática y pacífica para generar el cambio político que está exigiendo la mayoría de los venezolanos, con el objetivo de crear condiciones artificiales para una probable suspensión de las elecciones.

Tanto las inhabilitaciones selectivas de último momento para impedir que algunos candidatos de la alternativa democrática se pudieran postular así como el asalto jurídico a organizaciones políticas que adversas al gobierno forman parte de un plan que intenta generar una reacción desproporcionada de protestas callejeras que serían usadas como excusa para declarar un eventual Estado de Excepción, suspender las garantías constitucionales y evitar las consecuencias políticas de adversos resultados electorales.

Esta hipótesis podría ser considerada como una especulación intelectual, pero existen suficientes evidencias que indican que ante la posibilidad de que la pérdida de la mayoría parlamentaria por parte del oficialismo signifique el inicio de una debacle que alcance otros poderes, no sería extraño que un sector pretenda darle “un palo a la lámpara” para dejar al país en una absoluta oscuridad dictatorial y por esa ruta inconstitucional seguir gobernando, aunque la mayoría de la población los rechace.

RICARDO SANCHEZ, EL MAROMERO. Una de las conductas políticas que genera más rechazo en la población es el “saltatalanquerismo” porque es sinónimo de un oportunismo despreciable y de falta de compromiso con la causa que se profesa, pero también constituye un estigma que perseguirá toda la vida a quien lo practique debido a que se convierte en una persona en la que nadie puede confiar en ningún aspecto. En el caso de Ricardo Sánchez no fue una sorpresa que oficializara su “fervor revolucionario” porque desde que pasó a ser diputado principal por la inconstitucional defenestración de María Corina Machado (de quien era su suplente) comenzó a votar por todo lo que le ordenaban desde la bancada oficialista en la Asamblea Nacional; pero lo que no cuadra es que el Psuv lo haya postulado de quinto lugar en el orden de la lista en el estado Miranda porque es imposible que salga electo, ni siquiera como diputado suplente; lo que hace presumir que en ese acuerdo están incluidas otras prerrogativas que no son electorales y no sería extraño que lo veamos en un cargo público nacional después de diciembre. Actitudes como éstas son las que “encochinan” la política y lo más triste y deprimente es que se trata de un joven al que pareciera que no le impartieron valores familiares de lealtad, seriedad o responsabilidad y se convierten en un mal ejemplo para la sociedad.

LA UNIDAD PODRA GANAR GUAICAIPURO EL 6-D?. El oficialismo le ha ganado a la oposición las cuatro elecciones que se han realizado desde el año 2.000 hasta el 2.013 para elegir al alcalde de Guaicaipuro y por esta razón algunos consideran que este municipio es un “territorio chavista”; sin embargo cuando se analizan los resultados de otros comicios, la conclusión es que se trata de una zona con alta paridad electoral porque La Unidad y el Gran Polo Patriótico se han alternado en la misma cantidad de triunfos. Las cifras oficiales del C.N.E dan cuenta que en las parlamentarias del 2.010 el opositor Alfonso Marquina le ganó este municipio a la oficialista Aurora Morales, 65.740 votos a 50.377; triunfo que se repitió en las presidenciales del 2.013, cuando Capriles obtuvo 80.047 votos contra 72.214 de Maduro; y por el contrario, en las presidenciales del 2.012 Chávez sacó 77.121 votos y Capriles, 72.788; y Elías Jaua le ganó a Capriles 57.298 votos contra 52.834 cuando compitieron por la gobernación de Miranda, en el 2.012; pero al realizar el consolidado de estos cuatro resultados, el porcentaje de la oposición es de 51.36% contra 48.63% del oficialismo. No tengo ninguna duda de que La Unidad volverá a ganar el diputado a la Asamblea Nacional por este circuito debido a que la tendencia electoral de Carrizal y Los Salias le favorece ampliamente, con la cual compensaría cualquier hipotético y pequeño resultado adverso en Guaicaipuro; pero las actuales condiciones son peores para el chavismo que en el 2.010 y el reto fundamental para Delsa Solórzano es ganar también el municipio Guaicaipuro y lo puede lograr.

LA TARJETA UNICA. Los factores que integran La Unidad lograron el consenso de postular a sus candidatos con una tarjeta única, bajo cuatro criterios fundamentales para alcanzar un triunfo contundente el 6-D y que incidirán en el funcionamiento, fortalecimiento y permanencia de este esquema unitario. Aprobaron un comando único, una estrategia única, unos temas únicos de la campaña electoral; además, realizar elecciones primarias para todos los cargos públicos de elección popular. Este aspecto es fundamental porque implica que quedan abolidos los consensos y acuerdos en base a la proporción de votos que cada aliado obtuvo en elecciones previas, para dar paso a una verdadera democracia participativa y protagónica. Es decir, a partir de esta decisión todas las candidaturas de La Unidad a los cargos de Presidente de la República, Gobernaciones, diputados nacionales, legisladores regionales, alcaldes y concejales deben ser sometidos a una consulta previa de las bases opositoras. Así que los que tengan planes para ser candidatos de la alternativa democrática para cualquiera de estos cargos, deben comenzar a trabajar con tiempo para contarse en primarias.

 Sergio Graffe / Politologo

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