¿Qué es la Guayana Esequiba?

Aunque ya tenemos más de 150 años de una inexplicable guerra por un territorio que por obvias razones nos pertenece, un aporte más por mi parte no quedará impune ni de lado.

A lo largo de la historia, Venezuela ha luchado con Guyana por un buen pedazo de tierra al que muchos prefirieron llamar Zona en Reclamación, aunque su nombre real sea Guayana Esequiba.

La historia indica que en un inicio de la disputa, Venezuela aun no poseía alguna imagen respetable frente a las demás naciones y nuestro contrincante tenía un poderoso amo que, de un simple soplido, alargo las batallas; ese enemigo era Inglaterra. Pero tras largas luchas jurídicas y sobre todo fallos denigrantes por parte de los juzgados involucrados en el caso, para 1966 tuvimos la suerte de que la pequeña nación se independizara de Inglaterra y que de esta manera nuestro contrincante fue un país más endeble.

Es bien sabido que Venezuela no ha sido el mejor ejemplo para esa región, tenemos que admitir que hemos creado y cometido grandes errores que nos han hecho perder el sentimiento nacionalista por ese territorio. Pero a estas alturas del problema, aún estamos a tiempo de poder revertir todo el conflicto y finalmente salir vencedores. Las políticas por las que se ha regido Guyana han sido siempre variadas y nunca concisas, la explotación indiscriminada de sus tierras y mares ha dejado casi por desolada el territorio, dando como resultado una tierra que aunque sigue siendo rica, se demuestra, para muchos, como “monte y culebras”.

Recientemente el gobierno Guyanés sufrió un cambio político en sus pasadas elecciones, un nuevo gabinete que desprestigia las relaciones externas y sobre todo al venezolano. Puede que la mediación política y la repercusión que da en los medios sea puramente una cortina de humo que utiliza el gobierno socialista que actualmente tenemos para intentar levantar su nombre frente a los votantes y así tener un mejor resultado en las próximas elecciones asambleístas, pero es lamentable que sea en estas últimas semanas cuando le estemos metiendo pecho a un tema que nos ha perjudicado desde hace mucho tiempo.

Sinceramente me da igual el tema político en este caso, soy un venezolano más de estas tierras y lucho incansablemente por lo que por derecho me pertenece. Desde los tiempos del General Páez, Guayana Esequiba es un territorio venezolano, incluso algo que es reconocido a nivel internacional, y me parece una calamidad que otros se quieran crecer solo un poco e intente entrar en el mundo petrolero, intente meter sus manos en tierras que no son suyas.

Atrás hemos dejado en intercambio de arroz por petróleo refinado, contrato que justamente vence este año.

¿Por qué he escrito todo esto?

He escrito esta columna no solamente para hablar del tema del que todos ya hablan, ni mucho menos para estar en una especie de moda en las conversaciones. Escribo por todos aquellos incultos y estupidos que creen que Guayana es un pedazo de tierra más, algo que no nos debería de importar y que daría igual si otro país se lo queda.

Esa es una tierra que no hemos sentido como nuestra, hemos dejado que el tiempo la aparte de nosotros.

El principal paso para remendar nuestro error es producir en esa tierra como si no hubiera un mañana, hacer que hasta esa gente se sienta orgullosamente venezolana y luchen allá por pertenecer a nosotros. La verdad es que yo no podría dibujar a mi elefante sin una de sus patas y odio en la manera en que las escuelas perezosos profesores simplemente no dan información al respecto o peor aún, obligan a sus alumnos a hacer dibujos sobre nuestro territorio nacional y les hacen hacerlo sin su Esequibo.

Si nos dejamos quitar a Guayana Esequiba, estaremos perdiendo un pedazo de nuestra soberanía, de nuestro nacionalismo, de nuestras raíces y sobre todo de nuestro corazón.

Todos somos capaces de pensar, no dejes que otro lo haga por ti. Saca tus propias conclusiones.

Sr Interrogante

 

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