¿Leopoldo López puede salir libre antes de cumplir la pena?

Esta pregunta está referida específicamente a la reciente sentencia de la jueza 28 de Juicio de Caracas, Susana Barreiros, que condenó a Leopoldo López a 13 años, 9 meses, 7 días y 12 horas por encontrarlo culpable de cuatro delitos a propósito de los sucesos del 12 de febrero del 2.014; pero también vale para los estudiantes Christian Holdack, Demian Martín García y Ángel de Jesús Gonzales, cuyas penas fueron entre 4 y 10 años, y para el resto de los presos políticos que están detenidos en cárceles venezolanas por disentir del régimen cívico-militar.

Los tiempos para iniciar los trámites de liberación de los presos políticos venezolanos antes del vencimiento de la condena, varían según se trate de una amnistía de efectos generales mediante una ley simple aprobada por la mayoría absoluta de los miembros de la Asamblea Nacional (84 votos de 167) o de un acto administrativo del Ejecutivo Nacional a través de un indulto presidencial personalizado.

El mecanismo más inmediato está contenido en el artículo 187, numeral 5, de la Constitución Nacional que le da facultades a la Asamblea Nacional para decreta amnistías; lo que implica que como este 6 de diciembre se realizan elecciones para renovar a sus actuales integrantes, a partir de enero del próximo año se podría introducir el decreto de ley; y de esta circunstancia deriva la importancia de que la oposición pueda ganar la mayoría parlamentaria para darle seguridad administrativa a que le ley no sufra inconvenientes para su sanción y aplicación. Este procedimiento legislativo podría durar poco menos de un año.

La otra alternativa constitucional es el perdón presidencial, que podría ser a través del sobreseimiento de la causa antes de dictada sentencia firme para el caso de los procesados o del indulto para los sentenciados, según el artículo 236, numeral 19, que permite conceder indultos.

Es poco probable que el presidente Maduro tome la iniciativa de un indulto presidencial, según se desprende de sus opiniones negativas sobre el caso de los presos políticos venezolanos; sin embargo, existe la posibilidad de que la figura del indulto se pueda activar cuando venza el actual periodo presidencial en el año 2.019 con la elección de un nuevo presidente (la condena a Leopoldo López es hasta el año 2.029); pero también está el recurso del referendo para la revocatoria del mandato presidencial, como lo establece del artículo 72 de la Constitución Nacional a mitad del periodo para los cargos de elección popular y como el presidente Maduro fue electo el 14 de abril del 2.013, implica que los procedimientos para su activación se pueden iniciar a partir del año 2.016.

En todo caso, tanto la amnistía general como el indulto presidencial sólo pueden ser viables a través de un cambio político e institucional del país y las elecciones parlamentarias de este 6 de diciembre se presentan como una oportunidad para iniciar ambos mecanismos; y su implementación dependerá de esos resultados electorales porque la liberación de los presos políticos pasa por la voluntad del pueblo y no de alguna autoridad actual.

EL MIN NO ES LA UNIDAD. La judicialización de los conflictos internos de las organizaciones políticas que adversan al gobierno ha sido usada por los tribunales para secuestrar sus directivas y las nuevas están tratando de generar confusión en el electorado haciéndoles creer que sus candidatos a la Asamblea Nacional representan a la alternativa democrática; como está pasando con el MIN, porque no sólo ubicaron su tarjeta en la boleta electoral justo al lado a la de La Unidad (identificada con una mano y el dedo pulgar alzado) sino que hicieron postulaciones cruzadas con candidatos del oficialismo y supuestos opositores. Pruebas?. Los candidatos por la lista del Min en Miranda son “opositores”, pero llevan a William Ojeda (Psuv) en el circuito 3 de Petare y a Ricardo Fiori (ex copeyano?) por los altos mirandinos.

PARAPENTES EN VUELO BAJO. La inseguridad y el mal estado de la vialidad que conduce a El Jarillo han causado que el turismo haya bajado en un 70% en ese hermoso pueblo de nuestras montañas altomirandinas; sin embargo, la actividad de jóvenes parapentistas de la zona han mantenido el interés por seguirla visitando, especialmente los fines de semana; pero existe el peligro de que ya no podamos disfrutar del vuelo de los parapentes jarilleros porque apareció la dueña de los terrenos desde donde se lanzan y están construyendo unos locales comerciales en sus adyacencias. No se trata de atentar contra la propiedad privada, pero las autoridades locales están obligadas a buscarle una solución consensuada a esta situación porque de lo contrario habría que bajarle la “santamaría” a El Jarillo. Por cierto, sería interesante conocer el proceso de la permisología que autorizó este atentado contra todo un pueblo, porque los parapentes son un símbolo que forma parte de la identidad local y no quisiera pensar que fue una equivocación de un funcionario de esos que se trajo Garcés desde Caracas y que no conoce la realidad del municipio.

LAS AREPAS DE AD. El pasado domingo 13 de septiembre el partido Acción Democrática llegó a sus primeros 74 años de fundado; pero los adecos de Los Teques los celebraron como si fuesen unas fiestas patronales del pueblo porque eligieron a su reina blanca, hicieron una caminata por el centro de la ciudad en apoyo a Delsa Solórzano, celebraron la misa tradicional, le rindieron honores al Padre de La Patria en la Plaza Simón Bolívar, picaron una torta como de 30 kilos, jugaron dominó y truco, tomaron guarapita y hasta cantaron karaoke; pero lo más sorprendente fue que lograron el milagro de preparar y brindar un suculento desayuno criollo, como en los buenos tiempos de la Cuarta. Por cierto que cuando la socialcristiana Cristina Hernández (“lo más grande de Copei”, como le dice su compañera Yomaira Feo) vió que el plato que le ofrecieron contenía arepa con caraota y carne mechada, se lo engulló en un minuto y recomendó que los otros 200 comensales, entre adecos y aliados de La Unidad, hicieran lo propio para evitar que los acusaran de practicar un “bachaqueo blanco”, porque esos productos ya son considerados como exóticos debido a que dejaron de ser parte de la dieta diaria de los venezolanos, por escasos y costosos.

Sergio Graffe / Politologo

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