Rusia denunció que su embajada en Damasco fue bombardeada ayer con fuego de mortero procedente de la zona controlada por las fuerzas antigubernamentales, un ataque que no causó víctimas.
“Condenamos con firmeza el bombardeo criminal de la misión diplomática de Rusia en Damasco”, declaró el Ministerio de Exteriores ruso en un comunicado.
“Esperamos un claro pronunciamiento por parte de la comunidad internacional acerca de este acto terrorista”, manifestó el departamento.
“Lo que se requieren no son solo palabras, sino acciones concretas también”, añadió.
Según el texto, el ataque tuvo lugar este domingo por la mañana, y no causó víctimas, y procedía de una zona controlada por las milicias contrarias al régimen sirio de Bachar al Asad.
El comunicado de Exteriores se difundió poco después de una reunión en Moscú del presidente ruso, Vladímir Putin, con el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, quienes abordaron la situación en Siria y la búsqueda de un mecanismo de coordinación para evitar posibles enfrentamientos entre sus fuerzas en territorio sirio.
Durante el encuentro, Netanyahu explicó que el objetivo de su visita a Moscú es expresar su preocupación por la situación en Oriente Medio y concretamente en Siria, después de que fuentes occidentales denunciaran una escalada de la presencia militar rusa en el país árabe.
“En estas condiciones he pensado que era muy importante venir aquí para explicar nuestra postura y hacer todo lo posible para que no haya malos entendidos entre nuestras fuerzas (armadas) y las suyas”, dijo el primer ministro israelí a Putin.
Vía EFE