¿Quién soy Yo para este Estado criminal? Lo mismo que su Poder es para mí: Nada. Recuerdo que un viejo amigo llegó a – muy sabiamente – decirme “eres tú, hombre, la Nación completa… de ti, y sólo de ti, florecerá tu derecho y tu justicia, en tanto tu voluntad sea la de una legión de espartanos”… ¡Vaya que en estos momentos, es eso una sentencia! Retorno mi vista hacia mi bello país, vuelta un reino que venera a un bufón que no causa risa; que con sus cascabeles morales en su sombrero quiere coronarse como el Rey… el Rey por vulgar lástima.
En esta ocasión afilo mi pluma para, de tajo, destruir ídolos que irrespetan aun más a Venezuela, con sus actos – que con sus pretensiones de amor escritas muy probablemente por Sófocles –.
El personalismo político es el mismo acaparamiento del Poder, sólo que con la moral – los aires totalitarios soplan en esa dirección –. Se habla de moral, porque cuando el accionar político se genera desde una voluntad individual, recae en la percepción de dicha persona. En este aspecto la Izquierda es muy experimentada, recordando por supuesto, que en nuestro caso se ha vanagloriado de varios – y la situación actual no está exenta de ello –… por nombrar dos de esta categoría: Chávez y López. Este último goza de una maquinaria (y que) intelectual que justifica sus baratas maniobras con el fin de elevarlo como la espuma – la cual se disipará mucho más pronto que tarde –. VP sigue desesperadamente apostando al mandelismo planificado con tal de legitimar el 6D al narcocomunismo que le dará el peor de los venenos: las gotas de un Poder criminal.
Algo que generó una gran suspicacia fue una analogía tan sórdida como la de Luther King con López; alegato – más bien burla – que provocó que hiciere de las hojas un lienzo para pincelar los colores de la situación y repensar el bosquejo de lo que es una verdadera lucha política. Siendo uno un contrincante férreo del statu quo en su país, y otro un Rey de la lástima en un régimen de narcotraficantes, ¡vaya!, es suficiente banquete para alimentar a la musa que esperaba ansiosa a la cabeza de la mesa.
La lucha política NO es una lucha moral. Más bien se repelen: una constituye acciones que generan escenarios para concretar posibilidades, y la otra trata, por medio de las emociones, generar una percepción en particular con la ayuda de la manipulación. Alrededor de todo este cuadro una pregunta que puede surgir es, ¿cómo logran esto? Pues, a través de la lástima. Esta llave maestra del marxismo (en todas sus expresiones) es usada para tratar de argumentar o rebatir la naturaleza de un hecho – dependiendo del beneficio que puedan obtener de él –, ¡y es esto demasiado común en la clase política actual!
Entonces, habiendo establecido las bases, podremos entender que la imagen de King es producto de los ordenamientos jurídicos segregacionistas, un grupo de personas configuradas correctamente con un fin virtual, y de un enfrentamiento pleno y sólido al statu quo que imperaba en los Estados Unidos. Jamás fue victimizado – sacando las crucifixiones de la Izquierda –, ni necesitó generar lástima para elevarse mediática y políticamente. Claro estaba que esta porción de la sociedad era víctima de un racismo sistematizado (tanto en el aspecto cultural, como en el estatal), pero esto no fue siquiera argumento para empaparse en sufrimientos sobreactuados, ni de imágenes distorsionadas por “escritores” y medios de comunicación sedientos de rating…
¿López? Pues, él – como casi la clase política actual en su totalidad – es producto de la ficción democrática todavía conservada en la primera década del nuevo milenio que les dio una base política, la cual se resquebrajó a partir del 2012 con las elecciones presidenciales. No obstante, lo ocurrido el pasado año fue un escenario que se prestó para notar una evidente relación entre los narcotraficantes que tienen secuestrado el Poder y la MUD. Al ver los comicios venideros y a una población ensanchada, decidieron jugar la carta de la bestiecilla de Ramo Verde alegando que su encierro fue por el bienestar de todos, generando un razonamiento guiado por emociones realmente ciegas; tratando de conmover a una sociedad que sólo conoce una cultura acomodaticia y púbera. La imagen de López es sólo producto de la propaganda idealizadora, de los sueños mojados electorales de la MUD y de la urgencia de su estabilidad por parte del régimen.
Si López está en “el mismo nivel” de King: ¿Cómo denuncias una dictadura, e invitas a votar? ¿Con qué moral denuncias que no existe justicia, y te sometes a un Poder tomado por comunistas? ¿Por qué defiendes un “legado” de un asesino, cuya irrupción a la escena política fue por un intento de Golpe? ¿En qué cabeza cabe que la sentencia de López es una “victoria”?… sólo porque “conmueve” no significa que no es criticable, ni condenable lo que hizo (y hace).
Puedo decir con toda seguridad, ahora, que un referente moral no es aquel que utiliza sus heridas a su favor, sino quien entiende cómo falló y adquiere conocimientos sobre cómo evitar adjudicarse otra. Un referente moral no es quien, en una batalla, deja acribillarse “por el bien de todos” para que vean que el enemigo es “malo”. Firmemente digo que King fue un referente moral por el apego que tuvo a su lucha consciente – más el resultado que produjo esta –, y que López tan sólo es un conocido ideológico suyo…
King no necesitó de la lástima, sino de lo político; López y su séquito sí, que esperando el evidente – pero lentísimo, si es por ellos – desmoronamiento del narcocomunismo hacen de la mascota de Ramo Verde una bulla muy fastidiosa. King y MUCHAS otras personas le hicieron frente a un gobierno que mantenía en vigencia leyes racistas y a una cultura racista; López, en otra esquina, quiere causar lástima en un régimen de narcotraficantes. No confunda las situaciones, ni idealice a quien mantiene en su casa reuniones con traficantes de droga; mucho menos deje que lo embelesen ciertas “personalidades” de la intelligentsia de la MUD. La Venezuela Futura no tendrá en un nivel espiritual inalcanzable otra cosa que no sea la Libertad; únase y valórese a usted mismo por encima de todo y todos.
Libertad o nada.
Por @RafaelValera_ de @VFutura