. Lista. Así se encuentra la obra civil de la réplica modernizada del santuario de Fátima, construcción de 18 mil metros cuadrados que ha sido erigida gracias al aporte de más de 1.500 miembros de la Asociación Civil Amigos de Nuestra Señora de Fátima.
“Actualmente se están haciendo los acabados, una de las partes más delicadas, por lo que estimamos que la inauguración de este templo que será una referencia religiosa y turística altomirandina, nacional e internacional, esté lista en el año 2017, en coincidencia con el aniversario número 100 de la primera aparición de la Virgen de Fátima en Cova de Iría, Portugal, donde fue construida la iglesia original en su honor”, explicó Agustín Goncalvez, administrador de la asociación civil.
–Estamos trabajando en la colocación de vitrales y pisos. De hecho, ya se puso el sobrepiso y estamos próximos a colocar los 1.400 metros de mármol que fueron donados por empresarios de Caracas.
En cuanto a la imagen de cinco metros de la virgen tallada en Ecuador, Goncalvez aseguró que está lista pero falta cancelar el flete para que sea trasladada a territorio criollo, suma que debe pagarse en dólares, lo que ha complicado el traslado.
En materia de eventos profondos, agradeció a todas las personas que se han sumado a las verbenas. “Con solo efectuar una compra de alguno de los productos que son donados y aquí comercializamos están haciendo su aporte para seguir avanzando en esta imponente obra (…) Este es el último arraial del año; tenemos pensado reiniciar en febrero de 2016 y en 2017 estar abriendo las puertas de nuestro anhelado templo”.
Construcción colectiva
Pedro Goncalvez, cónsul de la región de Portugal, se mostró gratamente sorprendido tanto por la receptividad de las personas que asistieron a la última actividad de este año para recaudar fondos, como por los avances de la obra.
–La primera vez que se organizó un arraial fue en Súper Líder, donde estimábamos convocar a 500 personas y fuimos sorprendidos por 2.000. Ahora rebasamos las ocho mil personas, lo que habla de la fe y las ganas de las personas de tener este lugar de reconfortación espiritual.
Por su parte, Pablo Da Silva, directivo, refirió que es la verbena número 39 que se efectúa de forma satisfactoria. “En los Altos Mirandinos hay una población lusitana estimada de 30 mil personas que añoran la apertura de este lugar que es un espacio para todos los venezolanos”.
–La directiva comenzó con tres personas y ya sumamos 16, lo que hace que la contraloría sea aún más minuciosa y se garantice que cada bolívar que se genera en este tipo de actividades sea destinado para este templo que desde ya promueve la unión familiar; estas verbenas están pensadas para que las familias pasen un domingo diferente y hagan su aporte así sea con la compra de un refresco. Podemos decir que este es un dinero bendito con el cual seguimos avanzando cada día para cristalizar el sueño de toda la comunidad católica que venera a Nuestra Señora de Fátima.
Johana Rodríguez – [email protected] / @michellejrl
