En medio del caos que se ha vivido dentro y fuera de los pasillos del hospital Victorino Santaella (HVS) durante los últimos 3 días luego de que la muerte de un enfermero local desatará una serie de protestas liderizadas y promovidas por los trabajadores del nosocomio, familiares y pacientes del lugar aseguran estar de acuerdo con las exigencias de los médicos e indican que se solidarizan completamente con su causa.
Ester Hernández, mujer de 37 años cuyo hijo menor de edad se encuentra hospitalizado, aseguró que el hospital no está capacitado para la cantidad de gente que atienden y que el tema de los ascensores debería darle vergüenza a la junta directiva.
“Cómo es posible que de 18 ascensores no funcione ninguno, eso es un fallo demasiado grande para un hospital como este, yo tengo que subir y bajar 7 pisos varias veces al día para poder atender a mi hijo que esta hospitalizado en pediatría”.
Indicó que los médicos trabajan sin parar y “con la uñas” y que mucho de los representantes y familiares de los enfermos que se tratan allí apoyan 100% las protestas.
“Llevan mucho tiempo pidiéndolo por la buenas y lo que han hecho es burlarse de ellos, y de nosotros también, si este es el único modo de que presten atención entonces nosotros los apoyamos”.
Dijo que los servicios no han dejado de atender a sus pacientes a pesar de la situación que se ha vivido en el nosocomio durante los últimos 3 días.
“Ellos se han organizado bien y nosotros nunca hemos dejado de estar atendidos, mientras que las cosas se mantengan así nosotros estamos con ellos”.
ZA