Trump, de 69 años, uno de los aspirantes republicanos a la Casa Blanca en los comicios del año próximo, fue anfitrión del programa Saturday Night Live (SNL), en la cadena NBC, que durante hora y media ofreció una visión cómica del empresario.
El magnate se presentó con traje oscuro y varias corbatas de colores intensos, pero también vestido con chaqueta de cuero y lentes cuando representaba el papel de productor musical, o con capa oscura mientras tocaba las notas de un arpa de láser.
Ya desde el comienzo dejó claro que era una “persona maravillosa”, un “tipo simpático” que aspira a llegar a la Casa Blanca, y sólo estaban actuando como anfitrión de SNL porque no tenía “nada brillante que hacer”.
Recordó que la televisión lleva muchos años ridiculizándolo, incluyendo desde ese mismo programa de televisión, y llegó a aparecer junto a dos actores imitándolo, a izquierda y derecha, que se esmeraron por asemejarse al personaje real.
Parte de la sátira incluyó una parodia de reunión presidencial dos años después de su llegada al poder, acompañado por actores representando a distintos altos funcionarios, pero también estaba su hija Ivanka, que habla sobre la remodelación de la Casa Blanca.
Y también aparece un actor personificando al presidente mexicano, Enrique Peña Nieto, entregándole a Trump un cheque con un supuesto pago sobre el muro que hace meses prometió construir entre México y Estados Unidos para evitar el ingreso ilegal de inmigrantes, y que, según sostiene Trump, pagaría México.
Via Informe21