La pera es una de las frutas más refrescantes, dulces y nutritivas que nos ofrece la naturaleza. Su consumo no es tan popular como el de las manzanas o las naranjas, pero en los últimos años ha ganado adeptos por su versatilidad y las virtudes que la destacan a nivel medicinal.
La forma tradicional de ingerirla es en su estado natural, o bien, mediante la combinación con otras frutas y vegetales en un licuado.
Sin embargo, lo que pocos saben es que también se puede preparar un agua muy saludable, la cual funciona como remedio diurético y depurativo para eliminar los desechos tóxicos que dificultan las funciones de los principales órganos del cuerpo.
También es una forma alternativa de disfrutar su alto contenido de fibra y vitaminas del grupo B, C y E, además de minerales como el calcio, hierro y potasio.
1. Mejora la salud intestinal: Por su aporte significativo de fibra dietética, su consumo regular favorece la salud intestinal. Esta mejora el tránsito lento, evitando la acumulación de desechos y trastornos comunes como el estreñimiento.
También previene el deterioro de la flora bacteriana, lo que, a su vez, mantiene alejadas las infecciones y otras enfermedades.
2. Fortalece el sistema inmunológico: Tener un sistema inmunológico fuerte es sinónimo de menos episodios de gripe u otras infecciones virales.
El agua de pera contiene vitamina C, esencial para mejorar las defensas y ayudar al organismo a reponerse ante estos tipos de afecciones.
3. Apoya la reducción del colesterol: Cada pieza mediana de pera proporciona hasta 6 gramos de fibra soluble, nutriente que combate la acumulación de colesterol en las paredes arteriales y que desempeña un papel esencial en la salud cardiovascular.
4. Es sacian: Muchas personas evitaron durante mucho tiempo esta fruta al pensar que sus azúcares naturales influyen en el aumento de peso.
Lo cierto es que se trata de un alimento muy bajo en calorías y con carbohidratos sanos, el cual apoya la dieta para adelgazar porque aumenta la sensación de saciedad.
Tomar un vaso de su agua entre comidas le da al organismo entre 5 y 6 gramos de fibra soluble, que se compone de un grupo de sustancias viscosas las cuales al adherirse al intestino controlan la constante sensación de hambre.
5. Relaja los músculos: Los plátanos no son los únicos que aportan cantidades significativas de potasio.
La pera contiene hasta 210 miligramos por porción, lo que la hace saludable para regular el mecanismo de contracción y relajación de los músculos, a la vez que reduce el riesgo de calambres o tensiones.
El potasio también desempeña un papel fundamental en la salud cardíaca y del sistema nervioso.
6. Previene el envejecimiento prematuro: La piel también se beneficia de su consumo. Su riqueza en antioxidantes actúa contra el daño oxidativo de los radicales libres, principal causa del envejecimiento prematuro.
También participa en el aumento de la producción de colágeno gracias a su significativo aporte de vitamina C.
7. Previene la diabetes tipo 2: Las antocianinas presentes en las peras reducen los niveles de azúcar en la sangre y el riesgo de desarrollar enfermedades crónicas como la diabetes. En estos casos es esencial ingerir por lo menos 5 porciones a la semana.
Vía Mejor con salud