Ayrtib Senna: La vida por el automovilismo.

Fue el rey del automovilismo.
Fue el rey del automovilismo.

 Ayrton Senna afirmaba que en la curva de Eau Rouge en el Circuito de Spa-Francorchamps en Bélgica, hablaba con Dios

Edda Pujadas, @epujadas.- Más de dos décadas después de fallecer en un trágico accidente, Ayrton Senna sigue siendo una leyenda y es que, en 34 años de vida, logró convertir el automovilismo en una pasión tan grande como el fútbol en su país de origen, Brasil, aquella nación que el 1ero. de mayo de 1994 lloraba incrédula la muerte de uno de los mejores pilotos de la historia de la Fórmula 1.

Ayrton Senna Da Silva fue piloto de Fórmula 1. Nació en Brasil el 21 de marzo de 1960 y falleció en una competencia en el Autódromo Enzo y Dino Ferrari de Imola durante el Gran Premio de San Marino, el 1ero. de mayo de 1994.
Fue tres veces campeón del mundo, en los años 1988, 1990 y 1991. Logró también dos sub-campeonatos en 1989 y en 1993, los dos por detrás de su gran rival, el francés Alain Prost.

A lo largo de su carrera, ostentó casi todos los récords que se pueden conseguir en este deporte, incluido el de mayor número de pole positions, que fue igualado por el alemán Michael Schumacher, el 11 de marzo de 2006 en el circuito de Bahrein.

Su primera carrera la ganó en 1985 en el circuito de Estoril, en Portugal, bajo una lluvia torrencial, lo que dejaría claro que se convertiría en uno de los mejores pilotos de todos los tiempos sobre superficies deslizantes.

Hoy más que nunca, Ayrton Senna es considerado como uno de los pilotos más talentosos, inteligentes y carismáticos que la máxima categoría del automovilismo ha podido ver. Todos los especialistas coinciden en afirmar que muy pocos pilotos de la Fórmula 1 pudieron establecer una relación tan estrechamente íntima, personal y cercana con sus coches de carreras.

Ayrton Senna marcó un antes y un después en las pistas.

Senna logró entenderse a la perfección con su vehículo, el mismo que lo llevó a tocar los límites de lo sobrenatural, las barreras de velocidad que nadie esperaba alcanzar en plena competencia y los triunfos y premios que muchos de sus compañeros de campeonato desearon tener.

Senna decía tener una comunicación directa y exclusiva con Dios, que dejaba todos sus asuntos de lado cuando el gran hombre pedía una audiencia. Esta no era una relación común. Cuando pensamos en la comunicación entre Dios y un ser humano, nos imaginamos a éste arrodillado o de bruces, rogando, creyendo apenas en su suerte por tener un atisbo de la presencia divina.

Con Senna era diferente. Cuando hablaba de su relación con Dios, daba la impresión de que se trataba de un asunto más personal: no digamos que entre iguales, pero tampoco de servidumbre.

LLEGO EL FINAL
Cuando se corría una fecha más del Campeonato Mundial de Fórmula 1 durante el Gran Premio de San Marino en Imola, a la altura de la famosa curva de Tamburello, su monoplaza se despistó aparatosamente y la muerte de Senna se produjo por la rotura de la barra de dirección de su Williams FWI6 N° 2, que no le permitió afrontar el impacto de manera lateral en la curva de Tamburello.

Falleció durante el Gran Premio de San Marino en Imola hace 18 años.

La causa que acabó con la vida de Senna, casi de forma instantánea, fue la rotura de una pieza del brazo de la suspensión de su monoplaza que salió despedida del mismo y que atravesó su casco, perforándole el cráneo.
Antes de esa carrera, el propio Ayrton Senna le comentó a un periodista brasileño, que “me arriesgaré al decir que tendremos suerte si algo realmente serio no ocurre”. Incluso, había anticipado una temporada con mucho accidentes, producto de la suspensión de los sistemas de control de tracción y las suspensiones activas de los autos.

Su funeral fue impactante. Su ataúd fue llevado por las calles de São Paulo en un coche de bomberos, seguido por más de 2 millones de personas. Fue enterrado, con honores de jefe de Estado, en el Cementerio de Morumbí, de dicha ciudad brasileña.

Además de las múltiples ceremonias que rememoran a Senna, también se ha hecho una estatua de él en Imola. En el circuito de Interlagos hay una curva en forma de “S” que recibe el nombre de “S de Senna” y en Brasil hay una carretera muy importante en  São Pablo que tiene su nombre, así como múltiples parques y monumentos que llevan la identificación del tricampeón mundial en todo Brasil.

Senna, el filme del director londinense Asif Kapadia sobre el piloto brasileño de Fórmula 1, Ayrton Senna, recibió el premio Bafta a la mejor película-documental y el galardón al mejor montaje. La cinta repasa la trayectoria deportiva del tricampeón del mundo, haciendo especial hincapié en su rivalidad con el francés Alain Proust y en los problemas de seguridad en la época en la Fórmula 1.

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