Su interés por el medio artístico inició a temprana edad, cuando incursiona a bailar Tap actividad que practicó durante 9 años, luego queda cautivada con las cámaras, al realizar su primer comercial de dulces en Colombia, descubriendo la pasión que la guiaría por el resto de su vida.
Su etapa universitaria transcurrió entre micros y cortometrajes en la Universidad Monteavila, mientras cursaba la carrera de Comunicación Social, actividades que avivaron su entusiasmo por la actuación, realizó su primer taller con el cineasta Ralph Kinnard, para luego incursionar de lleno en el Gimnasio de Actores con Matilda Corrales, en el Banco del libro.
Logrando convertirse en parte del ámbito actoral, derribando las barreras y prejuicios que desacreditan esta profesión en la sociedad.
Desde ahí empezó su preparación en la Academia Stella Adler en Los Ángeles; donde contó con la valiosa instrucción en técnicas y modos de actuación por parte de Laura Leyva y Tim Mcnell, nunca imaginó que su desarrollo iría en ascenso y empezaría a forjar una carrera artística que la llevaría a la internacionalización.
