
Noelymar Peña cumplía la tarde de este miércoles 24 horas son dormir. La angustia de ver como la quebrada que pasa frente a su casa creció y se metió a su vivienda le provocó un ataque de estrés que obligó a su familia llevarla la madrugada de ayer al Pronto Socorro.
La de Noelymar fue una de las más de 20 viviendas afectadas por las torrenciales lluvias del martes. “Aquí al menos 18 familias resultamos afectadas por la crecida de la quebrada”, apunta la joven, contraviniendo las cifras de Protección Civil que aseguran que en El Vigía, popular sector tequeño, sólo hubo 15 casas afectadas.
Mientras el cielo siga “encapotado” en El Vigía nadie duerme. “Tenemos miedo de que vuelva desbordarse, todo fue muy rápido, yo sólo perdí ropa pero hay vecinos que lo perdieron todo”, narra.
45 minutos de lluvia fueron suficientes para que pasadas las 7:30 de la noche el nivel de agua superara el limite y se metiera a las casas. Hace un año ocurrió exactamente igual, por lo que muchas familias, como es el caso de los Peña, tenían ubicados sus electrodomésticos en alto.
El agua superó los 30 centímetros en la casa de la joven. “Lo que me separa de la quebrada es una pared, el agua se metió por todos lados, todo ocurre en segundos, es muy poco lo que se puede hacer”, explica.
Efectivos de Protección Civil recorrieron la zona afecta al amanecer, levantaron un censo y pidieron a los vecinos permanecer alertas. Noelymar cree que si sele hubiese limpiado la quebrada se hubiese evitado la inundación. “Eso estaba lleno de basura, ahora que perdimos todo es que vienen a ver qué necesitamos, lo que queremos es autoridades que trabajen en prevención”, dijo.
Daniel [email protected] @dmurolo