Un año después de que un grupo de hackers demostrara que podía controlar un Jeep en movimiento, Fiat Chrysler Automobiles N.V. pagará a este tipo de expertos informáticos para que le ayuden a mejorar sus fallos en ciberseguridad.
El fabricante de automóviles italo-estadounidense está lanzando un programa que tiene el objetivo de compensar a los hackers con entre 150 y 1.500 dólares cada vez que descubran potenciales fallos de ciberseguridad en los vehículos y alerten a la compañía.
El fabricante recurrió a Bugcrowd Inc., una firma de San Francisco que gestiona programas de recompensa de errores para retribuir a los hackers que deseen trabajar con empresas u otro tipo de organizaciones para descubrir fallos.
Bugcrowd ya gestiona un programa para el fabricante de coches eléctricos Tesla Motors Inc., que el año pasado fue víctima de un ataque cibernético de perfil alto.
Un grupo de investigadores de ciberseguridad reveló entonces que habían conseguido una forma efectiva de apagar un Tesla Model S saboteando su sistema de entretenimiento.
