En el texto aseguró que “las razones son muy sencillas, es un programa muy particular a cuyo concepto no me adapté, me faltaba malicia que nunca fluyó naturalmente de mi parte hacia los entrevistados, a quiénes pido disculpas, era muy forzado para mí seguir ese hilo de irreverencia y humor negro necesario para encajar en el programa.
En lo personal muchos conocen ya la historia, pero nadie cómo a quienes nos ha tocado vivirla de cerca, cosa que le dejo a Dios y al tiempo”.
Además explicó que “estar en el programa fue una oportunidad que me ayudó a crecer profesional y personalmente, en donde conocí personas maravillosas y viví momentos fantásticos. Un ciclo que debo cerrar pero un trampolín para todo lo que viene».