Ante el anuncio de la Superintendencia de Precios Justos (Sundde) de que aplicarían multas a todas aquellas panaderías en las que personas mantuvieran colas para comprar el producto, comerciantes de la capital mirandina expresaron su posición.
A pesar de que el superintendente afirmó que las largas filas para obtener pan son innecesarias debido a que “la materia prima está llegando con normalidad”, panaderos manifestaron que todavía esta situación no se ha regularizado del todo, ya que la cantidad de harina que les llega no es suficiente para una demanda tan alta.
“Las colas no son culpa de nosotros”, aseguró Edison Bonilla, gerente de una panadería ubicada en Los Teques que constantemente está abarrotada de personas que esperan a las afueras para comprar el producto.
Según Bonilla, las colas en ese establecimiento son consecuencia de la regulación.
“Solíamos vender el pan a 450 bolívares hasta que nos vimos obligados a bajar los precios. Actualmente una canilla tiene un valor de 120 y un campesino 189. Debido a que tenemos cuatro comunidades alrededor, todos esos habitantes vienen en búsqueda de pan barato; como son tantas personas, no alcanza para cubrir las necesidades de todos y muchos se van con las manos vacías”, manifestó.
El gerente declaró que el establecimiento es surtido con poca periodicidad y en cantidades pequeñas.
–En años anteriores los proveedores traían hasta 100 sacos que eran suficientes para el mes y el pan salía a lo largo de todo el día. Ahora tenemos un límite por la cantidad de harina; el pan sale solo tres veces al día. Por otro lado, tampoco tenemos azúcar y hace poco estuvimos parados dos días gracias a la falta de levadura.
Destacó que a veces tienen que optar por comprar con sobreprecio y que eso es perjudicial para el negocio.
“No estamos ganando lo suficiente; hay que pagar servicios como la luz y el agua, además de los sueldos de los 12 trabajadores que tiene el local. Estamos haciendo averiguaciones para conocer las posibilidades de subir un poco el precio y así cubrir gastos.”
Con respecto a las colas, comentó que tomarán medidas para evitarlas y así no ser multados.
Asimismo, un comprador que se encontraba en la panadería expresó su descontento al no poder adquirir el producto porque se había acabado. “Es una injusticia ni siquiera poder comprar algo tan básico como el pan durante una crisis alimenticia como esta”, comentó.gf
María Fernanda Pérez Cruz-mfpc176@gmail.com