El 1º de setiembre se denunciarán los derroches y corruptelas que han vaciado las arcas públicas, recursos que han debido disponerse para remediar las necesidades de los venezolanos
El próximo primero de septiembre las calles y avenidas de Caracas se convertirán en ríos humanos. Dicho de otra manera, serán cauces de muchedumbres que desfilarán con las armas que saben empuñar los ciudadanos con firmes convicciones democráticas: la bandera nacional y un coro entonando la heroica canción de la patria amada. Ese es el espíritu inmerso en el alma de los habitantes de esta generosa tierra. Será una marcha variopinta, porque nos confundiremos venezolanos de todos los ámbitos. Será una Venezuela representada por mujeres y hombres de diferentes razas, profesiones, credos religiosos e ideologías políticas. Asistirán ciudadanos de los barrios más populares y gentes de la clase media tan maltratada por este régimen. Será una multimarcha en todo el sentido de la expresión. Se mostrarán pancartas reclamando justicia para que pueda resplandecer la paz en una nación que padece por los odios de unos gobernantes que se han empeñado en fracturar sentimentalmente a la sociedad. Se denunciarán los derroches y corruptelas que han vaciado las arcas públicas, recursos que han debido disponerse para remediar las necesidades de los venezolanos. Pero, fundamentalmente, se exhibirá el rostro de venezolanos esperanzados en que esta etapa aciaga de nuestra historia quedará como eso: parte de la historia que se habrá de recordar para tener esta tragedia como una lección de vida que no debe repetirse jamás.
El próximo primero de septiembre será la aurora de la libertad que buscamos con pasos democráticos, teniendo como lámpara que alumbra en esta oscuridad la mismísima Constitución Nacional. Por eso reclamaremos la fecha para realizar la recolección de firmas que activen, definitivamente, el referéndum revocatorio previsto en el artículo 72 de nuestra Carta Magna. ¿Puede haber una prueba más fehaciente de que nuestra voluntad es democrática y cívica?
Las carreteras serán colmadas por viajeros de la ilusión que saldrán de sus hogares esa madrugada, para hacerse presentes en la multimarcha del 1 de septiembre. Será la oportunidad para expresar lo que se piensa está ocurriendo en nuestra Venezuela y lo que esperamos alcanzar con nuestra lucha. Será un reencuentro de venezolanos que hoy estamos unidos por la indignación que nos produce un régimen desfachatado como este que nos desgobierna, y unidos en la fe de que juntos sacaremos victoriosamente adelante a nuestra Nación.
Mitzy C. de Ledezma