Usuarios enfurecidos denunciaron que “los más vivos” compran sin hacer toda la fila y que las autoridades no toman medidas
El día de ayer, se presentó una situación irregular en el Central Madeirense de la capital mirandina. Habitantes de la ciudad comenzaron a gritar y exigir la presencia de las autoridades debido a que distintas personas empezaron a colearse y esto les impedía comprar un combo que incluía aceite comestible, harina de maíz y mantequilla.
Mujeres embarazadas, madres con niños pequeños, personas discapacitadas y ancianos, permanecían a las afueras del comercio, exponiéndose a cambios climáticos, con hambre y cansancio.
Consumidores aseguran que llegaron a las 4:00 am y que al llegar la tarde seguían en la fila, sin haber podido adquirir los productos debido a que cada vez llegaban más personas para colearse y esto los hacía estar más lejos de su objetivo de adquirir los productos.
Al percatarse de esta situación, muchos comenzaron a empujarse mutuamente y a agredirse verbalmente.
Inclusive, una mujer que se encontraba en la cola, sufrió un desmayo. La fémina estuvo inconsciente por varios minutos.
“Ni siquiera hay un servicio de paramédicos presente para que se encargue de estos casos”, expresó Carmen Martínez.
Los usuarios denunciaron que el Comité Local de abastecimiento y Producción (CLAP), no está supervisando correctamente las colas que se forman en el lugar.
“Incluso pasan a sus amigos, familiares y conocidos”, sostuvo Adrián Castro, lugareño.
Añadió que el “vivo” es el que compra.
–Es injusto porque nosotros estamos aquí desde tempranas horas de la madrugada arriesgándonos. Estamos cansados y con el estómago vacío. Deberían respetar la ley y hacer la cola como todo el mundo.
Asimismo, manifestaron que las autoridades presentes no se ocupan de estos sucesos.
“Tienen el uniforme de adorno y además se burlan de nosotros”, opinó Gabriela Martínez.
Finalmente, hicieron un llamado al alcalde, para que tome las medidas necesarias ante este tipo hechos.
“Queremos que se sancione a todos los que intenten colearse y de igual forma a los bachaqueros”, finalizó.
María Fernanda Pérez Cruz
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