“Se olvidaron de la existencia de esta comunidad, está abandonada y nadie le hace mantenimiento a las zonas públicas”, aseguró Héctor Martínez, residente, haciendo referencia a la nula atención brindada por parte de las autoridades gubernamentales.
Las plazas han llegado a un alto nivel de deterioro. Los bancos se desmoronan y las baldosas del suelo ya prácticamente no existen. La Roque Pinto y la Bolívar están sufriendo los efectos del pasar del tiempo y la falta de reparaciones. “Cada vez estamos peor, es la decadencia total”, opinó.
Por si esto fuera poco, actualmente la estética de estos emblemáticos lugares está siendo perjudicada por montones de matorrales que fueron dejados luego de un desmalezamiento.
Corroboró que hace un mes y medio cuadrillas asistieron a la comunidad a cortar el monte y posteriormente se fueron dejando los desechos en el lugar.
–Hay cantidades de residuos, escombros y restos de monte en las plazas. Esto le impide a las personas acudir a las mismas, sin mencionar que están notablemente dañadas.
Declaró que la alcaldía recogió parcialmente en la Plaza Roque Pinto, pero en los otros lugares “no hicieron ni siquiera el intento.”
Vecinos opinan que el tipo de iniciativas como el corte de maleza son muy beneficiosas, pero no es justo que dejen los desechos en el lugar. Califican estas acciones como “contraproducentes” y sostienen que si se va a hacer alguna tarea “debe hacerse bien.”
Martínez denunció que las plazas se encontraban en un estado deplorable pero ahora es aún más decadente gracias a ese “adorno” que les dejaron.
Hicieron un contundente llamado a la alcaldía para que se encargue de todas estas situaciones y se “ponga seria” ante las problemáticas que aquejan a las comunidades.
Vialidad destruida
Huecos, grietas y fallas de borde son de lo más abundante con respecto a las calles y carreteras. Las vías están agudamente deterioradas y para el descontento de pobladores, ninguna autoridad ha parecido mostrar interés o preocupación suficiente para solventarles el problema.
Las fallas viales se extienden a lo largo de todo el pueblo y según muchos, “no hay sitio que se salve de esto.”
Aseguran que la avenida que intercomunica a San Pedro con Los Teques está repleta de barro, monte, troneras y fallas de borde, lo que casi imposibilita el traslado en vehículo.
“La alcaldía está incumpliéndonos, no hace absolutamente nada; deberían estar trabajando por la comunidad, solucionando percances y ejerciendo su trabajo”, indicó una sampedreña.
Lugareños denunciaron la situación, ya que es un posible causante de accidentes viales, en los que podrían haber pérdidas humanas o materiales.
A su vez, exigieron a la alcaldía hacer acto de presencia y encargarse de reparar las calles y carreteras.
Delincuencia a millón
Los actos delictivos, como en muchos otros sectores, están desatados. Desde robos a mano armada hasta secuestros y asesinatos son el “pan de cada día” de los residentes de este poblado.
Vecinos aseguran que el patrullaje que se realiza en la zona es insuficiente para cubrir “de largo a largo” el sector.
Asimismo, el transporte público es uno de los principales focos de inseguridad.
–Tienen las camioneticas a monte, ya nadie puede dirigirse en paz a su destino porque en cualquier momento se montan unos tipos y encañonan a los pasajeros para despojarlos de sus pertenencias.
Solicitaron a las autoridades intensificar los procesos de patrullaje y poner más puntos de control y vigilancia.
“Queremos sentirnos sanos y salvos en nuestra comunidad”, dijo otro habitante.gf
María Fernanda Pérez Cruz mfpc176@gmail.com