Para decenas de familias el vertedor El Limoncito se convirtió en su despensa

El Limoncito
Cada domingo mujeres y hombres acompañados de sus hijos hurgan entre la basura que generan los altomirandinos en busca de algo para cocinar y comer.

Es domingo primero de enero, mientras el resto de la población descansa tras festejar el año nuevo, para Eugenio y su familia la jornada inicia bien temprano. “Los niños esperan aquí mientras nosotros buscamos comida”, reseña Eugenio mientras termina de armar con lonas, plásticos y cartón una improvisada carpa para proteger a sus pequeños del sol.

“Venimos cada domingo desde hace varios meses, esta es nuestra nevera”, agrega el hombre mientras señala las enormes montañas de desperdicios que conforman El Limoncito, el vertedero de basura más grande de los Altos Mirandinos.

Eugenio viene de Las Tejerías, población ubicada a poco más de 8 kilómetros del basurero. “Acá vienen familias de muchos lugares, hay de Los Teques, Carrizal e incluso de Caracas”, agrega el hombre.

“La situación es critica, aquí conseguimos verduras, frutas e incluso pedazos de carne y pollo que traen de las carnicerías y que aun están buenas”, explica. Dice que jamás en su vida pensó que le tocaría vivir una situación tan “dura y humillante, venimos aquí por necesidad, estamos pasando hambre”, explica.

 Los más deseados

Para quienes El Limoncito es su despensa producto de la profunda crisis que aqueja al país que trajo como consecuencia escasez y hambre, los camiones de aseo que provienen del Municipio Carrizal son los más “deseados”.

Por tratarse de la jurisdicción que concentra la mayor cantidad de centro comerciales y empresas las unidades llegan bien cargadas; “los que traen los desperdicios de la zona de La Cascada vienen con bastante comida”, reseña una mujer de unos 25 años, quien se niega a revelar su nombre.

Explica que en la zona de Corralito hay al menos dos supermercados –Fresco Market y Central Madeirense-, los encargados de estos centros clasifican los desperdicios por lo que resulta mucho más fácil para quienes buscan “detectar” lo comestible.

“Ya conocemos los camiones de cada una de las alcaldía y sabemos más o menos en cual buscar y en cuales no”, agrega la mujer. Este domingo para las 11:00 de la mañana ya habían encontrado suficiente, “pese a que el aseo está trabajando por guardias, las poquitas unidades que ingresaron temprano traían mucho”.

Cada domingo decenas de personas ingresan a El Limoncito, ubicado en el tramo de la carretera Panamericana que comunica la capital mirandina con el estado Aragua. Quienes buscan alimentos entre los desperdicios aseguran que es el “día más seguro” para hurgar entre los desperdicios.

Un trabajador del aseo urbano del Municipio Guaicaipuro, quien pidió el anonimato por seguridad, aclara que de lunes a viernes el lugar está tomado por una banda conformada por unos 50 integrantes “fuertemente armados” que se dedica a la venta de cobre, cartón, plástico y aluminio, “cobran vacuna por lo que nadie se atreve a venir”.

Niños y adultos hurgan entre montañas de basura en busca de comida

 Fuera del vertedero

En Carrizal cada tarde un grupo de unas 12 personas espera ansiosa a que se detenga al aseo a recoger la basura de la panadería “La Reina del Negro” ubicada en el centro comercial Porto Fino. “A penas detengo el camión se suben a revisar las bolsas, es una situación difícil, al principio no se los permitía, pero estamos hablando de personas que tienen hambre”, narró uno de los chofer.

En Los Teques los «mejores» lugares con «comida buena» –aseguran quienes hurgan- son aquellos en los que restaurantes, panaderías y mercados vierten sus desperdicios, y son justamente estos los «territorios» más concurridos y más «peleados» por los necesitados, y también por algunas «bandas» que, aseguran, se aprovechan de la situación de ellos.

El Mercado Municipal de El Paso o las panaderías y fruterías ubicadas en la calle Guaicaipuro son los puntos predilectos por quienes urgen alimentos. Se conocen los horarios de los establecimientos e incluso ayudan a la hora de sacar las bolsas con la condición de que les permitan ser los primeros en revisar.

Sin respuesta

La Región intentó la mañana de este domingo consultar la opinión de alguno de los miembros de la Empresa de Propiedad Social (EPS) Trinchera del Sur, encargada de la administración del vertedero sin lograr contactarlos, igualmente con representantes del servicio de aseo urbano del Municipio Guaicaipuro.

Daniel Murolo – dmurolo@diariolaregion.net / @dmurolo

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