A su vez, los vídeos almacenados en la aplicación estarán disponibles desde web, aunque no desde la app. Vine murió por dos razones: el abandono de estrellas de la plataforma en favor de nuevas redes sociales, como Instagram o Snapchat, que demostraron ser más efectivas para llegar al público, rentabilizar el contenido y conseguir más seguidores.
Por otro lado, la indiferencia de Twitter y la falta de una visión hizo que la primera app en apostar con fuerza por el vídeo quedara olvidada y terminara por ser totalmente prescindible.Antes de que esto ocurriera, Vine fue un rincón de la comedia y tuvo un éxito explosivo en sus primeros años de vida, hasta que Instagram implementó la opción de subir vídeo, que en un primer momento estaba limitado a 15 segundos en clara referencia a la brevedad de Vine.