Dormir mal una vez al mes quizá pueda resultarte normal (la noche antes de la junta, ¿quién podría conciliar el sueño?), pero si eso te está pasando desde hace tiempo o recientemente varias veces a la semana, podrías estarte enfrentando a un trastorno del sueño sin saberlo y es importante que lo averigües lo antes posible.
Y es que de acuerdo con Robert Oexman, Director del Sleep to Live Institute, “insuficiente cantidad y calidad del sueño puede conducir a la fatiga diurna, disminución de la capacidad de concentrarse en las tareas, aumento del riesgo de accidentes automovilísticos y al bajo rendimiento en el trabajo o la escuela”.
¿Estás durmiendo mal? Pon atención a estas señales, ellas te indicarán si sufres un trastorno del sueño.
1 Te sientes cansado
Aunque duermas ocho horas (o más) te levantas con la sensación de que estás aturdido y muy cansado. Además, te resulta complicado mantener tus ojos abiertos para realizar las actividades cotidianas (como trabajar o comer) y no te sientes alerta de lo que pasa a tu alrededor.
2 Duermes menos de 4 horas
Si solo logras conciliar el sueño durante 4 horas cada noche (por más que te esfuerzas en dormir) es que tienes un trastorno del sueño. Liana Werner-Gray, autora de «The Earth Diet», indica que el cuerpo necesita descansar por lo menos 8 horas cada noche –esto puede variar, pero levemente-.
3 Sientes ardor en el estómago
El ardor de estómago frecuente puede ser un signo de apnea del sueño –una enfermedad en la que dejas de respirar cientos de veces, desde 10 segundos hasta más de un minuto, por las noches-. Si sientes mucha acidez o indigestión, tanto de día como de noche, algo anda mal.
4 Rechinas los dientes
Crujir o apretar los dientes inconscientemente durante la noche, es un síntoma de una condición llamada bruxismo del sueño (que se considera un trastorno del movimiento relacionado con dormir y que dificulta cerrar los ojos). Esto puede llevarte a su vez a sentir dolores de cabeza.
5 Te cuesta trabajo respirar al dormir
¿Te cuesta trabajo respirar durante las primeras horas de la noche? La apnea del sueño también provoca esto, debido a que tus vías respiratorias dejan de funcionar adecuadamente mientras duermes. Igualmente, roncar (si comúnmente no lo haces) es un signo de esta condición.
6 Tienes mucha hambre
Cuando no duermes lo suficiente, tus hormonas del hambre (grelina y leptina) se desequilibran y potencian tu apetito. Por eso, si tienes antojo de comida azucarada, chatarra y carbohidratos refinados, tu cuerpo está buscando la energía que no obtuvo al dormir, indica Werner-Gray.
7 Las pesadillas te persiguen
Si tienes sueños que son muy visuales y espantosos, los cuales te despiertan y no te dejan dormir después, es posible que presentes un problema llamado trastorno por pesadillas.
Éste puede alterar tu estado de salud y emociones durante el día siguiente de manera grave.
Si te identificaste con una o más señales, es importante que consultes con un especialista.
Tus hábitos de sueño son vitales para tu salud y es importante que recibas atención especializada.
