Al menos veintiún personas, entre ellas catorce niños, murieron ayer por bombardeos contra las poblaciones de Idleb y Maarat al Masriyín, en el norte de Siria, informó el Observatorio Sirio de Derechos Humanos.
El mayor número de fallecidos se registró en Idleb, capital de la provincia homónima, donde al menos catorce menores, cinco mujeres y un varón perdieron la vida en dos ataques al amanecer de aviones de combate, que se cree que eran rusos, contra la zona de Al Qusur.
La ONG no descartó que el número de muertos en este bombardeo aumente, porque hay desaparecidos bajo los escombros.
Por otro lado, al menos una mujer pereció y varias personas resultaron heridas en un ataque similar de aviones no identificados en el pueblo de Maarat al Masriyín, también en la provincia de Idleb.
Esta región está controlada casi totalmente por el Organismo de Liberación del Levante (la alianza armada de la exfilial siria de Al Qaeda) y otros grupos.
Hoy se cumple el sexto aniversario del inicio de la guerra en el territorio sirio, que ha causado más de 321.000 muertos, de acuerdo al último recuento publicado por el Observatorio.
