Las uñas frágiles o quebradizas a menudo son el resultado normal del envejecimiento, pero también pueden deberse a ciertas enfermedades y afecciones como la anemia, hongos en las uñas, eczema, hipotiroidismo, deficiencia de hierro, psoriasis y tuberculosis. También pueden ser indicativo de una deficiencia nutricional.
Al igual que las manos, las uñas sufren de las agresiones externas. Se rompen, se abren, y pueden incluso volverse tan frágiles que es imposible mantenerlas largas. Si tienes este problema no dudes en probar alguno de estos remedios naturales para lucir unas uñas perfectas, son fáciles, rápidos y baratos.
Remedios que puedes aplicar desde casa.
El poderoso ajo
Agregar al esmalte de uñas trocitos de ajo picado o frotarlo directamente sobre las uñas, es de los remedios caseros más populares para fortalecer la uñas y ayudarlas a crecer. El ajo produce una sustancia química llamada alicina, que le aporta la mayoría de sus propiedades y efectos medicinales.
Cebolla milagrosa Es un maravilloso remedio para tener unas uñas más fuertes, es rica en zinc, un mineral que ayuda a fortalecerlas y evita la aparición de manchas, mientras que el azufre que contiene ayuda a estimular la producción de queratina, una proteína fundamental para las uñas.
Jugo de limón Incluirlo en la rutina del cuidado de las uñas, contribuye a fortalecerlas y reforzarlas, solo tienes que exprimir un limón, mojar un algodón en el jugo y aplicar sobre cada uña. Deja secar y luego enjuaga con agua tibia.
Muchos son los remedios que puedes aplicar desde casa, pero entre las recomendaciones más importantes es no morderlas para ya que si se vuelve un hábito puede dañar tanto las uñas como la piel que se encuentra alrededor de ellas, así lo considera el Dr. Michael Shapiro, un dermatólogo de Nueva York.
Las uñas están formadas principalmente por queratina, una proteína que necesita para su correcta formación y desarrollo una buena cantidad de vitaminas, principalmente A, B, y C, minerales como el zinc, el hierro, el yodo o el calcio y aminoácidos azufrados presentes en las proteínas de origen vegetal y animal.